Y se cumplieron los pronósticos. "El cambio empieza ahora", han sido las primeras palabras del líder del Partido Laborista, Keir Starmer, y próximo primer ministro de Reino Unido. Unas declaraciones que no pueden ser más acertadas, ya que, tras 14 años de mandato 'tory', el país ha dado portazo a los conservadores, sumiéndoles en una porfunda crisis y concediendo a los laboristas una victoria aplastante.
Resultados de las elecciones en Reino Unido
A falta de los resultados definitivos, que se esperan en las próximas horas de este viernes, a las 11.30 horas (en España, 10.30 horas en Reino Unido), ya se han repartido 648 escaños de los 650 que componen la Cámara de los Comunes. De estos, 412 corresponden a los de Starmer, mientras que Rishi Sunak se queda en los 121.
Sin embargo, para el hasta ahora inquilino del 10 de Downing Street no todo son malas noticias. Ha conseguido mantener su escaño en la Cámara baja de Westminster, algo que no se daba por seguro.
El Partido Conservador de Sunak se hunde en una crisis sin precedentes, perdiendo más de dos centenares de escaños de los 365 logrados en los comicios de 2019.
Los datos suponen que, en este momento, el Partido Laborista sume 214 representantes y el Conservador se desplome, perdiendo 251.
De esta manera, los whigs van en camino de lo que las encuestas barajaban las últimas semanas: registrar su mejor resultado desde el récord de 418 logrado en 1997 por el antiguo dirigente también laborsta Tony Blair -que logró un tercer mandato consecutivo-.
Eso sí, si se observa el porcentaje de votos obtenido, la diferencia no es tan abrumadora: el Partido Laborista se ha hecho con un 33,8% de los votos (un 1,6% más que en las anteriores elecciones), mientras que los 'tories' se han quedado en el 23,7%, que han caído casi 20 puntos en cinco años.
El Partido Conservador, en una crisis sin precedentes
El Partido Conservador de Sunak se hunde en una crisis sin precedentes, perdiendo más de dos centenares de escaños de los 365 logrados en los comicios de 2019, que ganó Boris Johnson con su promesa de ejecutar el Brexit.
Sunak trató de minimizar los daños y que la debacle de su partido no fuese tan desemsurada. No obstante, el que llegó al poder como ex banquero de inversiones, tampoco ha logrado convencer. Ha apostado por uno de los temas más controvertidos, la inmigración, y su plan de deportar a Ruanda los solicitantes de asilo -declarado ilegal por le Tribunal Suprmeo- no ha terminado de calar en la sociedad británica. Entre sus defensores, la idea es que no ha cumplido con su promesa.
Desde que tomó la decisión de adelantar las elecciones a julio cuando todas las encuestas auguraban un desastre, Sunak ha sido cuestionado.
Por ello, aunque no lo ha anunciado oficialmente, todo apunta a que Sunak dejará la jefatura del Partido Conservador una vez que haya abandonado también el cargo de primer ministro, aunque este mismo jueves algunos colegas de partido le pidieron que continuara.
Intento frustrado de evitar la "supermayoría" laborista
En las últimas semanas, tampoco ha logrado revertir la situación. Su criticada decisión de abandonar la ceremonia de conmemoración del 80 aniversario del desembarco de Normadía por una entrevista en televisión o que miembros de su partido apostasen sobre la fecha de las elecciones antes del anuncio, no han remado a favor.
Además, recurrió en última instancia al ex primer ministro Johnson para su campaña y tratar de contener la "supermayoría" laborista. El antiguo líder británico hizo la noche de este martes su imprevista aparición en una reunión de activistas conservadores en el Museo Nacional del Ejército, en el centro de Londres, pero tampoco ha causado efecto en las urnas a su favor.
"El poder cambiará de manos de manera pacífica"
Sunak apareció tras conocer su reelección como diputado por la circunscripción norteña de Richmond y Northallerton, admitiendo que "el Partido Laborista ha ganado estas elecciones". Ha felicitado por su victoria al contrincante y ha pedido perdón por los resultados de su formación.
"Hoy, el poder cambiará de manos de manera pacífica y ordenada, con buena voluntad de todas las partes. Esto debe darnos confianza a todos en la estabilidad de nuestro país y su futuro", ha dicho para reconocer que hay "mucho de lo que aprender y reflexionar" y asumir "la responsabilidad".
The work of change begins today. pic.twitter.com/DfP1UG1Upr
— Keir Starmer (@Keir_Starmer) July 5, 2024
Mientras, Starmer ha celebrado el triunfo y declarado que "el cambio empieza ahora". "¡Lo hicimos!", ha expresado para añadir que el país tiene ahora "la oportunidad de recuperar su futuro". Según el dirigente labortista, los británicos, de los que cuyo objetivo es "recuperar la confianza", "finalmente se han quitado un peso de los hombros de esta gran nación".
"Hay que devolver la política al servicio público y demostrar que la política puede servir para el bien común", ha aseverado el líder laborista, que asumió el liderazgo de la formación tras la cruda derrota de Jeremy Corbyn en 2019, la peor de la historia del partido.
"We did it… Change begins now."
— Channel 4 (@Channel4) July 5, 2024
Sir Keir Starmer delivers his victory speech as the Labour Party reaches a majority and wins the general election.
Watch #C4BritainDecides NOW on @channel4 until 9am. #GeneralElection2024. pic.twitter.com/iIGBwD5UEn
Sistema electoral en Reino Unido
En el sistema electoral británico, mayoritario uninominal y sin listas, gana el candidato más votado en cada una de las 650 circunscripciones -número total de escaños en el Parlamento, con una mayoría establecida en los 326-, al margen del porcentaje de voto de las formaciones a nivel nacional. A esto se denomina first-past-the-post.
No están obligados a lograr la mayoría para gobernar ni existe la segunda vuelta, como en el caso de Francia.
Aunque el sistema electoral favorece el voto útil, no refleja el número de votos que recibe cada partido. Así, aunque millones de personas respalden a una formación, esta no consigue escaño si no gana en alguna circunscripción.
¿Y ahora qué?: próximos pasos
En las próximas horas, Sunak dejará la jefatura del Ejecutivo para dar paso a Starmer, que se convertirá en primer ministro tras recibir el 'permiso' del rey Carlos III, como marca la tradición.
Una vez en el número 10 de Downing Street, despacho y residencia oficial, se espera que dé su primer discurso a la nación y empiece a designar a sus ministros.
El nuevo Parlamento se inaugurará el próximo martes con la elección del presidente y el 17 de julio el rey abrirá oficialmente el periodo de sesiones con un discurso en el que anuncia el programa legislativo del Gobierno.
En concreto, los sillones en la Cámara baja se reparten de la siguiente manera: 543 para Inglaterra, 57 para Escocia, 32 para Gales y 18 para Irlanda del Norte.
La Cámara de los Comunes, la más poderosa y cuyos miembros son elegidos en los comicios, es la encargada del Poder legislativo del país: crea las leyes, aprueba los Presupuestos y controla al Gobierno.
Por el contrario, los miembros de la Cámara de los Lores no son elegidos, son lores vitalicios, hereditarios u obispos. Se encargan de la revisión y las sugerencias a las enmiendas a la legislación propuesta por los Comunes.