Estados Unidos esta pendiente de un tren descarriló entre el área de Ohio y Pensilvania. Un total de 50 de los 150 vagones que tenía quedaron destrozados. Un suceso que ha quedado empañado por los globos espía que se están detectando en diferentes zonas del país.
Diez de los vagones transportaban sustancias tóxicas y tras la salida del tren comenzó un incendio que cubrió de humo todo el pueblo de East Palestine. Con miedo a que se produjera una explosión, las autoridades decidieron delimitar una zona de evacuación. Pero, ¿qué ha ocurrido y qué puede pasar ahora?
¿Qué ha ocurrido en Ohio?
El pasado 3 de febrero un tren descarrilaba en East Palestine, Ohio, un pueblo en el que residen unos 4700 habitantes y que se encuentra situado a 80 kilómetros del noroeste de Pittsburgh. El tren, que estaba operado por Norfolk Southern, transportaba diferentes productos químicos y materiales combustibles entre los que se encontraba cloruro de vinilo, un gas tóxico inflamable.
Este descarrilamiento provocó un gran incendio con una densa humareda que era visible a varios kilómetros y desde el cielo. Tras lo ocurrido, las autoridades decidieron evacuar a todos los residentes de la frontera entre Ohio y Pensilvania.
El pasado 8 de febrero, el gobernador de Ohio, Mike DeWine, dijo en un comunicado que se había observado un "cambio drástico de temperatura" en un vagón, y que los equipos estaban trabajando para evitar una explosión. Los equipos especializados planearon liberar químicos de al menos cinco de los vagones, que se encontraban inestables, para reducir el riesgo de explosión.
La oficina del gobernador anunció en comunicado que los residentes podían empezar a volver a sus hogares después de que las diferentes muestras de calidad del aire mostraron lecturas en puntos por debajo de los niveles de detección de seguridad para contaminantes preocupantes.
Además, la planta de tratamiento de agua de la zona señaló que no se habían observado efectos adversos. Según Norfolk Southern se estaba analizando el agua de varios pozos privados y se estaba animando a todos los ciudadanos a consumir agua embotellada.
No ha habido muertos ni heridos por el descarrilamiento, aunque las dudas sobre la seguridad de la zona siguen estando presentes. Algunos habitantes de la zona han comentado que peces de East Palestine se estaban muriendo y lo están compartiendo en las redes sociales.
¿Qué puede pasar ahora?
Casi diez días después de este suceso, el senador J.D. Vance aseguró en una publicación a través de Twitter que se había producido un "complejo desastre medioambiental" y que habría que hacer un estudio a largo plazo.
Vance también dijo: "Muchas preguntas siguen sin respuesta sobre la calidad del sistema de frenado utilizado, la durabilidad de las piezas de reparación en los trenes y el enfoque regulatorio del Departamento de Transporte para el sistema ferroviario de nuestra nación".
Según recoge The New York Times, la Agencia de Protección Ambiental de Ohio está trabajando en la limpieza de la zona, aunque todavía no se sabe cuándo se recuperará la completa normalidad del lugar.