La primera ministra británica, Theresa May, ha garantizado este viernes a la canciller alemana, Angela Merkel, que los preparativos para la salida de Reino Unido de la UE van según lo previsto y que el proceso legal comenzará para finales de marzo de 2017.
"Nuestro trabajo está encarrilado, seguimos estando preparados para activar el Artículo 50 antes de finales de marzo o para finales de marzo 2017", ha indicado May a Merkel durante un briefing conjunto a la prensa en Berlín antes de una reunión bilateral.
Los comentarios de May se producen tras las persistentes críticas por parte de diputados opositores de que el Gobierno no tiene una estrategia de salida.
También existe la posibilidad de que sus planes se vean demorados por una decisión judicial de que debe conseguir la aprobación del Parlamento antes de activar el Brexit. El Gobierno apeló la decisión y el Supremo debe pronunciarse a principios de diciembre.
"Quiero ver esto como un proceso tranquilo, un proceso ordenado, trabajando hacia una solución que esté en el interés tanto de Reino Unido como también de nuestros socios europeos", ha afirmado.
Merkel ha sostenido que no es posible discutir el Brexit en detalle durante su reunión de este viernes ya que Londres aún no ha iniciado el proceso formal para abandonar el bloque.
Por otra parte, el Tribunal Supremo británico ha anunciado este viernes que permitirá al abogado del Gobierno escocés que intervenga en la sesión de diciembre sobre si es necesaria la aprobación del Parlamento del inicio del proceso de salida de la UE.
El Gobierno británico ha llevado el caso al Supremo para apelar un veredicto del Tribunal Superior en el que se estipulada que el Parlamento debe dar su visto bueno previo antes de que comience el proceso formal de salida.
Según ha indicado este viernes el Supremo, permitirá al lord abogado del Gobierno británico defender la relevancia de la legislación escocesa en la vista. También se permitirá la intervención de representantes legales del Gobierno galés, del sindicato independiente de trabajadores y un grupo llamado Expat Interveners.
La ministra principal de Escocia, Nicola Sturgeon, ha dicho que activar el artículo 50 "privaría a Escocia de derechos y libertades de los que actualmente goza".