La Unión Europea no tiene información de que el Frente Polisario esté colaborando con grupos terroristas activos en la región del Sahel ni tampoco ha constatado que la ayuda que el bloque hace llegar a los campos de refugiados saharuis en Argelia se esté desviando para otros fines.
Así lo ha indicado el Alto Representante de Política Exterior, Josep Borrell, en respuesta a una pregunta formulada por el eurodiputado francés Brice Hortefeux, del PPE, quien había pedido a la Comisión Europea que aclarara las medidas que iba a tomar para evitar esta eventual cooperación.
El exministro del Interior galo apuntaba en su pregunta a "una posible connivencia" entre el Polisario y los grupos terroristas en el sentido de que el grupo que gobierna la autoproclamada República Árabe Saharaui Democrática (RASD) estaría proporcionando "armas y apoyo logístico, incluido carburante" a los grupos terroristas.
Asimismo, Hortefeux sostenía que "los vínculos entre el Polisarí y los grupos terroristas no son nuevos", citando el hecho de que "los fundadores de Estado Islámico en el Gran Sáhara", la filial del grupo en el Sahel, "Abú Walid y Abú al Saharaui, eran combatientes del Polisario".
"La UE no tiene información sobre una potencial colaboración entre el Polisario y grupos terroristas en la región", ha señalado Borrell, que sin embargo ha dejado claro que "la UE seguirá de cerca los acontecimientos" en el Sahel, una región cuya estabilidad y seguridad está comprometida a preservar.
Por otra parte, en cuanto a la cuestión de si la Comisión Europea comprueba que los fondos envía a los campos de refugiados de Tinduf se destinan a fines humanitarios, Borrell ha explicado que la rendición de cuentas es "crucial" para Bruselas y por ello se realizan auditorías con regularidad.
La ayuda solo vía ONU Y ONG
En los últimos cinco años, ha precisado el jefe de la diplomacia europea, se han llevado a cabo seis auditorías de las acciones humanitarias llevadas a cabo en los campamentos saharuis, tras puntualizar que la ayuda humanitaria se canaliza exclusivamente a través de las agencias de la ONU y de ONG internacionales.
Además, ha añadido Borrell, "para reducir aún más cualquier riesgo de desvío de ayuda, la Comisión organiza visitas regulares de observación a los campamentos y solo financia proyectos para los que hay en vigor un sistema exhaustivo de monitorización".
A esto se suma el hecho de que se exige a las organizaciones internacionales que reciben fondos de la UE que presenten "un informe financiero final para demostrar que la ayuda humanitaria se ha entregado", ha rematado.
Borrell ha asegurado que "cualquier acusación de irregularidad es comprobada exhaustivamente" pero "hasta ahora la Comisión no ha detectado ninguna prueba de desvío de ayuda".