Los periodistas de El País han respondido en las urnas a la elección de Antonio Caño como director. De los trescientos empleados con derecho a voto, participaron 226 (73%). Y de los que votaron, solo 97 (42,9%) apoyó la llegada del nuevo jefe supremo del diario. Hasta 81 redactores (35,8%) se manifestaron en contra y otros 47 (20,8%) depositaron papeletas en blanco. El resultado supone un claro castigo para Caño, que aunque consigue más votos a favor que en contra ve cómo el 56,6% de los que votaron este lunes optaron por no apoyarle. Es el peor resultado cosechado por un elegido para el cargo en la historia del diario, según fuentes del mismo. El referéndum no es vinculante. Ahora, el consejo de adminsitración de Prisa, que se celebra el miércoles, debe ratificar el nombramiento.
Como adelantó Vozpópuli, la dirección de la empresa y, por ende, del diario temía una respuesta negativa en forma de voto de castigo. Y es que los manejos entre el presidente de Prisa, Juan Luis Cebrián, y Caño para sustituir a Javier Moreno no sentaron bien entre los empleados del rotativo generalista más leído en España. Sobre todo porque en la redacción cayó como una bomba que el elegido como director enviase al directivo un email que contenía críticas al staff dirigente y a parte de la plantilla. Email cuya existencia desveló este diario en exclusiva y cuyo conocimiento público precipitó el relevo al frente de la cabecera del conglomerado mediático.
Un email que no se olvidará
El resultado de este referéndum interno supone un varapalo para Cebrián, cuyas relaciones con la redacción que en su día dirigió son peor que malas. Pero es obvio que el fatal correo electrónico mencionado pesará siempre sobre Caño. Así lo evidencia la votación celebrada este lunes. La verdad es que el director saliente, Moreno, tampoco obtuvo una gran votación cuando fue nombrado, allá por el año 2006. Entonces, un 40% de la redacción votó en contra de su llegada. Pero el químico que ahora pasará a ocuparse de los contenidos de Prisa Publicaciones al menos obtuvo un 60% de apoyo entre quienes votaron. Como se ha dicho, Caño solo ha obtenido el 42,9% de apoyos de los participantes frente al 56,6% que suman los votos en contra (35,8%) y en blanco (20,8%).
Una vez que la redacción ha hablado en esta votación no vinculante, ahora corresponde al consejo de aministración de Prisa, que se reúne este miércoles, ratificar el relevo en la dirección del diario. Eso sí, el cambio no se hará efectivo hasta el próximo 4 de mayo, día del aniversario del periódico. Es decir, en lo que queda de febrero, marzo y abril se vivirá una suerte de cohabitación, con Moreno dirigiendo el periódico y Caño siguiendo de cerca los movimientos del hombre al que sucederá poco después. Una situación que tampoco se recuerda en la redacción de El País.
Mientras en la planta de 'El País' se votaba el nombramiento, en la planta de Asip se lloraban los 91 despidos
La citada votación se ha celebrado justo el mismo día en que Prisa comunicaba a la plantilla de Asip (Agrupación de Servicios de Internet y Prensa) los nombres elegidos para dejar de trabajar allí. Se trata de 56 despidos y 36 prejubilaciones. Es decir, 91 personas se quedan sin empleo. En un principio, la compañía pretendía acometer 98 despidos. Tras arduas negociaciones se llegó a un acuerdo que ha sido igualmente doloroso para los empleados. El hecho de que la comunicación de los despidos haya coincidido con la votación sobre el nombramiento de Caño ha propiciado una situación cuando menos llamativa en la sede de Miguel Yuste. "Unos votaban en una planta y una planta más abajo solo había lágrimas", resume un trabajador de Prisa.
