La Cámara de Cuentas de la Comunidad de Madrid ha comunicado a los responsables de Telemadrid que próximamente enviará a sus ‘hombres de negro’ a sus dependencias para analizar la contabilidad que registró entre entre los ejercicios 2008 y 2015, con Esperanza Aguirre e Ignacio González como presidentes regionales. Durante este período estuvieron vigentes los controvertidos contratos de explotación de los derechos audiovisuales del Atlético de Madrid y del Getafe C.F., que motivaron la apertura de una investigación hace unos meses dentro de la Comisión de Corrupción de la Asamblea autonómica.
Para realizar la compra de estos derechos, que ascendió a 300 millones de euros, se puso en marcha la sociedad Madrid Deporte Audiovisual, participada por Telemadrid (49%), Caja Madrid (47,5%), el club presidido por Enrique Cerezo (2,5%) y el getafense (1%). "Lo que se pagó fue normal, a precio de mercado", aseguró Cerezo en febrero durante su comparecencia en la comisión de investigación.
La Asociación de afectados por la gestión de la televisión pública madrileña (AGTPM) llevó este asunto a los tribunales, al considerar que los directivos de Telemadrid cometieron administración desleal y malversación al firmar estos contratos. Dicha causa fue archivada en enero 2015 por el Juzgado de Instrucción número 36 de Madrid, que no encontró indicios de delito en estos hechos.
Compromiso con Ciudadanos
La auditoría de la Cámara de Cuentas sobre la gestión económica de Telemadrid deriva del acuerdo de investidura que alcanzaron en 2015 el Partido Popular y Ciudadanos, por el que Cristina Cifuentes se comprometió a analizar la contabilidad de las empresas dependientes del Gobierno regional durante dicho período, han detallado fuentes de la formación naranja.
En este tiempo, por cierto, se realizaron algunas de las supuestas actividades delictivas que salpican a los Ejecutivos autonómicos de Aguirre y González, dentro de operaciones como Púnica y Lezo. De hecho, la Cámara de Cuentas trabaja desde hace unos meses en varios informes de fiscalización de la actividad económica del Canal de Isabel II -epicentro de Lezo-, la agencia de informática y telecomunicaciones de la Comunidad de Madrid (ICM) y la Ciudad de la Justicia, según precisó en febrero su presidente, Arturo Canalda.
La televisión pública madrileña estuvo dirigida en este período por Manuel Soriano (hasta octubre de 2007), por Isabel Linares (2007-2011), por el actual presidente de Radiotelevisión Española, José Antonio Sánchez (2011-2014); y por Ángel Martín Vizcaíno (2014-2017). Su audiencia se desplomó en 7 puntos en estos años y sus pérdidas económicas ascendieron a 765 millones de euros.
La oposición parlamentaria y los trabajadores de la televisión autonómica denunciaron en reiteradas ocasiones los casos de manipulación informativa -para beneficiar al PP- que se registraron en los noticiarios de Telemadrid mientras Esperanza Aguirre e Ignacio González estuvieron al frente de la comunidad autónoma.
Ciudadanos exigió a Cifuentes la "despolitización" de este medio de comunicación para apoyar su investidura, lo que durante la actual legislatura ha motivado, entre otras cosas, la destitución de los responsables de sus noticiarios durante la anterior etapa y la salida de algunos de los periodistas que tuvieron un mayor protagonismo.
La auditoría de la Cámara de Cuentas determinará en su estudio si existen irregularidades en los contratos y las facturas que presentó Telemadrid durante esa época. También se analizará el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que aprobó en enero de 2013 el consejo de administración de la cadena.
