"Esta oferta está sujeta a la obtención de las pertinentes autorizaciones regulatorias y al cumplimiento de las condiciones habituales en este tipo de transacciones". Así se expresaba Telefónica en el hecho relevante que envió a la CNMV para comunicar al mercado su oferta de 725 millones por Digital Plus. Horas después, Orange denunció la operación ante la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), como desveló Vozpópuli. Algo ciertamente lógico si se tiene en cuenta que de culminarse la operación la multinacional pasará a controlar el 80% del mercado de la televisión de pago. Las diversas fuentes del sector consultadas aseguran que el escenario más probable es que Competencia apruebe la transacción pero después la Comisión Europea opte por limitarla.
Los datos hablan por sí solos. Según el informe del tercer trimestre de 2013 elaborado por la Comisión del Mercado de las Comunicaciones, ahora englobada en la CNMC, Digital Plus domina los ingresos por la televisión de pago, con 274,59 millones de euros. Imagenio, de Telefónica, logra 52,23 millones. Ono obtiene 36,6 millones y el resto de operadores alcanzan, entre todos, los 37,9 millones restantes. Es decir, los ingresos de televisión de pago de los operadores suman 401,32 millones de euros. Si Telefónica y Digital Plus se uniesen, algo más que probable después de que Prisa haya aceptado la oferta de la multinacional, acumularían 327,13 millones, lo que supone el 81,5% del total.
El presidente de la CNMC insistió hace mes y medio en que Bruselas debería esta cuestión por tener "dimensión comunitaria"
Así las cosas, la única esperanza para los competidores de Telefónica es que o bien la CNMC o bien las autoridades europeas tomen cartas en el asunto e impidan una posible situación de monopolio en el negocio televisivo de pago. No parece, sin embargo, que las autoridades españolas vayan a mover ficha en este espinoso asunto. Sobre todo porque el propio presidente de la CNMC, José María Marín Quemada, afirmó a principios de marzo que la posible compra de Digital Plus por parte de Telefónica debería ser analizada por Bruselas por su dimensión comunitaria. Incluso, advirtió que la operación, entonces eventual y ahora a punto de concretarse, tiene "implicaciones importantes" para la competencia en España. "Es una cuestión de dimensión comunitaria", afirmó el máximo responsable del macrorregulador español.
Orange ha puesto dos denuncias: por abuso de posición dominada y por degradación de la red tradicional telefónica
Sea como sea, con la adquisición en marcha Telefónica añadiría a su oferta actual nuevos servicios televisivos y, por ello, habría que ver si otros operadores pueden replicar con facilidad, al mismo tiempo que habría que estudiar los precios a los que se realizan dichas ofertas. Los competidores de la compañía presidida por César Alierta insisten en que no hay precedentes en ningún país europeo sobre semejante concentración de servicios en una misma compañía. Por ello, Orange presentó este miércoles dos denuncias ante la CNMC contra Telefónica por abuso de la posición dominante y "degradación" de la red tradicional telefónica.
Dictamen obligado
Marín Quemada explicó en su momento que sólo si alguno de los operadores afectados lo considera oportuno o si el propio regulador español, argumentando la importancia del mercado en España, solicitara atraer para sí el estudio del asunto, la decisión sobre la operación podría recaer en la CNMC. Una vez que Orange ha denunciado la operación, está claro que la CNMC tendrá que pronunciarse. Cuestión distinta es que su dictamen sea negativo para los dos implicados en la venta. Las fuentes consultadas no son muy optimistas al respecto y dan por hecho que el macrorregulador pasará este complejo asunto a las autoridades europeas. Y éstas raraz vez tumban por completo una operación, sino que suelen apostar por cercernar, recortar o modificar en algunos aspectos las operaciones.
La intervención de las autoridades de la Competencia pueden demorar varios meses el cierre de la venta de Digital Plus
En el hecho relevante con que Prisa admitió la oferta de Telefónica, el grupo mediático habla de un plazo de 30 días para negociar los contratos. Sin embargo, la intervención de las autoridades de Competencia, sean las nacionales o las europeas, puede demorar varios meses el cierre de la venta de Digital Plus. Sin ir más lejos, hay un caso en que una adquisición, en este caso bancaria, se retrasó seis meses por la intervención de la Comisión Europea. Se trata de la compra de la CAM por parte del Banco Sabadell. Éste último se adjudicó la caja en noviembre de 2011 pero no fue hasta mayo de 2012 cuando consiguió el visto bueno de Bruselas.
En aquel caso el Sabadell tuvo que vender oficinas y reducir su actividad en las zonas donde tenía una posición demasiado dominante en el mercado. Si eso se traslada al caso de Digital Plus y Telefónica, la opción más factible es que esta última tendría que desprenderse de algunos derechos deportivos ya adquiridos o ceder espacios a sus competidores. Otra posibilidad es que la Comisión Europea tumbe la operación en su totalidad, lo que sería un verdadero drama para Prisa. En cualquier caso, ahora hay que esperar a que la operadora de telefonía y el grupo mediático acuerden los flecos de la operación. Entonces, Bruselas tendrá la última palabra.