La familia Berlusconi revelaba hace unas horas sus planes para intentar hacerse con el control de un mínimo del 95,6% de Mediaset España y un máximo del 100%. Lo hará mediante una OPA sobre el 44,31% de la empresa que no controla, por las que ofrece 5,6 euros por cada acción a sus propietarios. Junto con la oferta, lanzaba un mensaje a los accionistas y a las autoridades españolas en el que avanzaba algunos de sus planes de futuro.
La intención del magnate italiano y de sus descendientes pasa por aglutinar sus negocios bajo el abrigo de Media for Europe, un holding internacional que tiene su sede en Países Bajos y desde la que se gestionarán sus negocios de España, Italia y Alemania.
Con la operación, espera lograr 'sinergias' que asciendan a 340 millones de euros en los próximos 4 años que, entre otras cosas, prevé invertir en producción para sus televisiones y para la venta a las empresas de contenido bajo demanda.
Con respecto al futuro del negocio televisivo español, Media for Europe ha anunciado que la intención es que se gestione mediante un Consejo de Administración independiente pese a los cambios societarios que se producirán con la agrupación de sus activos.
El órgano de gobierno de Mediaset España estará presidido de forma oficial, a partir de la próxima Junta General de Accionistas, por Borja Prado, quien sustituirá en el puesto a Alejandro Echevarría, que ha sido nombrado presidente de honor y premiado con una bonificación por jubilación de 2 millones de euros.
El director de operaciones durante los últimos años ha sido Paolo Vasile. Al respecto de este ejecutivo, Media for Europe no se ha pronunciado acerca de si mantendrá su puesto en España y/o si asumirá nuevas funciones en la empresa resultante, tal y como especulan fuentes internas.
No reducirá la plantilla
Sea como sea, los Berlusconi han incidido en que su intención es la de mantener la producción interna dentro de España, la de pagar los mismos impuestos dentro de este país y la de no reducir la plantilla de la empresa.
Hay que tener en cuenta que Mediaset ha sido el negocio de medios de comunicación más rentable de España durante los últimos años, con un beneficio acumulado de más de 1.600 millones de euros desde 2012. Al contrario que la inmensa mayoría de las compañías del sector, no ha realizado reducciones de plantilla, ni se acogió al mecanismo del Expediente de Regulación Temporal del Empleo al principio de la pandemia.
Telecinco fue líder de audiencia durante 35 meses consecutivos y su dominio del mercado publicitario –junto a Atresmedia- ha sido absoluto.
Según los últimos datos publicados por la consultora Infoadex, en 2021 aglutinó el 43,2% de la cuota de mercado, frente al 40,4% de Atresmedia. Sus ingresos publicitarios descendieron el 6% en el último trimestre del año –el mercado lo hizo el 4,8%-, en el que Telecinco perdió el liderato de la TDT, en favor de Antena 3. Sin embargo, en el conjunto del año mejoraron el 9,8%.
Fusión de los negocios
La operación de compra del 44,31% de Mediaset España sucederá en un momento en el que Vivendi ha realizado varias maniobras expansionistas -entre ellas, con su entrada en Prisa- y en el que las nuevas formas de ver la televisión han disipado el interés sobre la televisión convencional.
Sin ir más lejos, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) estimaba el pasado octubre que el 53% de los hogares españoles con acceso a internet dispone de los servicios de Netflix, HBO y/o Amazon Prime Video.
Fuentes oficiales de Media for Europe han hecho referencia a este fenómeno en el documento en el que oficializan la operación: las televisiones convencionales "se están volviendo cada vez más vulnerables a la competencia proveniente del gigante tecnológico internacional y al debilitamiento de su poder de negociación frente a todas las principales partes interesadas de la industria que ya dependen de una huella internacional".