Los espectadores suelen despegarse de la rutina y del televisor en verano. Hubo un tiempo en el que esta época era sinónimo de desconexión de la actualidad. Desde la playa, se tomaba distancia de los hábitos y las agendas; y la preocupación por la última hora era menor. Aparecieron las pantallas móviles y todo eso cambió. Las noticias digitales acompañan actualmente al individuo allá donde va. Sin embargo, las televisiones convencionales no forman parte del equipaje de los ciudadanos. De ahí que los meses de verano sean una especie de barbecho.
Este julio era diferente, dado que se celebraban unas elecciones generales decisivas en España. Estuvieron precedidas por una campaña que implicó la emisión de tres grandes debates en la TDT: un cara a cara entre Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo; un coloquio a tres bandas entre Sánchez, Yolanda Díaz y Santiago Abascal; y un intercambio que contó con siete portavoces parlamentarios.
Pese a todo, el consumo de televisión convencional descendió con respecto al séptimo mes de 2022. Lo hizo el 1%, es decir, en 2 minutos diarios, lo cual resulta especialmente significativo si se tiene en cuenta que el verano de 2023 se inició con mucho más interés informativo que el anterior.
Del máximo al mínimo en una década
En febrero de 2013 -hace algo más de 10 años-, las televisiones sacaban pecho porque habían alcanzado su cúspide. Cada español permanecía 4 horas y 32 minutos al día delante de la pantalla. Es decir, 272 minutos. El pasado febrero, el dato había descendido hasta los 197 minutos. En julio (un mes de menor consumo), fue de 168.
Llama la atención porque el tiempo en el que el televisor se emplea para “otros usos”, más allá del de ver los programas de la TDT, se incrementó el 28%, hasta los 41 minutos al día. Los espectadores cada vez emplean más este electrodoméstico para, por ejemplo, sintonizar vídeos de YouTube u otras plataformas.
No es casualidad que el medio televisivo sea el único que perdió inversión publicitaria durante el primer semestre de 2023, en el que la economía del país creció y los anunciantes incrementaron su gasto global (2,8% en todas las plataformas, 1,9% en los medios tradicionales, según i2P, de Arcemedia).
A la televisión le destinaron un 3,7% menos que en el primer semestre de 2022, mientras que a los medios digitales, el 4,3% más, a la radio, un +6,9%; a la prensa, un +1,8%, a los buscadores, un +3,2% y a las redes sociales, un +4,8%. El dato de inversión publicitaria en rojo ha dejado de ser anecdótico para convertirse en tendencia dentro de la televisión convencional.
Los jóvenes de 13 a 24 años son los que menos ven los canales de la TDT, con 61 minutos al día (-9%), seguidos de los niños de 4 a 12 años, con 70 minutos (-1%), las personas de entre 25 y 44, con 92 minutos (-9%), las de 45 a 64, con 206 (-2%) y las de más de 64 años, con 311 (+3%).
Con los datos de la mano, se puede comprobar que el único sector de la población donde se incrementa el uso del televisor es el de la tercera edad.
Los jóvenes de 13 a 24 años son los que menos ven los canales de la TDT, con 61 minutos al día (-9%), seguidos de los niños de 4 a 12 años, con 70 minutos (-1%)
Asturias (+2%) y País Vasco (+8%) son las comunidades autónomas donde más se vio la televisión en este julio de campaña y elecciones, con 191 y 186 minutos, respectivamente. A la cola se encuentran Baleares (-3%) y Cataluña (-1%), con 153 y 151 minutos. En 10 de las 17 regiones españolas el consumo descendió el mes pasado.
Elecciones e informativos de televisión
¿Y cuáles fueron los informativos más vistos durante el julio político? Sin ninguna duda, los de Antena 3, con una ventaja de 700.000 espectadores con respecto a TVE, que ocupa la segunda posición en la lista.
El noticiario de Sandra Golpe lo ven 2 millones de personas diarias, de media (20,6%), mientras que el de Vicente Vallés, 1,68 millones (18,9%). Llama la atención el sorpasso de La 1 a Telecinco en esta faceta. Salvo en la sobremesa de los fines de semana, consiguió situar sus noticiarios por encima de los de su competidor de Mediaset en todas las franjas.
La emisión más vista del mes de campaña electoral fue el cara a cara entre Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo, con el 25% de cuota de pantalla en Antena 3 y el 21,4% en LaSexta. La segunda con más público fue el debate del 19 de julio entre Sánchez, Díaz y Abascal, con el 28,8% en La 1. De los 25 programas que más audiencia registraron, 23 fueron políticos o informativos.
Julio fue un buen mes para las televisiones autonómicas, lo cual se explica, entre otras cosas, en la 'pegada' que tienen entre los ciudadanos de sus comunidades autónomas -algunas de ellas- durante los grandes acontecimientos. Canal Sur logró su mejor julio desde 2010, mientras que Aragón TV, el mejor desde 2013. TV3 consiguió su mejor séptimo mes del año desde 2007, la televisión gallega, desde 2009 y Extremadura TV, desde 2020.
Los noticiarios de la aragonesa obtuvieron un dato global del 27,1%, los de la catalana, del 25,8% y los de la EiTB vasca, del 18%.