Grupo Vocento ha puesto en marcha nuevas medidas de ajuste con las que tratará capear el desplome de la inversión publicitaria y un mercado audiovisual en horas bajas. Fuentes de la compañía cotizada explican que en dos áreas del grupo se aplicarán, de manera independiente y con diferentes condiciones, bajas laborales temporales con las que se rebajará la masa salarial: el área corporativa (tres empresas del holding) y Veralia (filial que aglutina las diferentes firmas audiovisuales de Vocento).
Cerca de 70 empleados de Veralia estarán de baja obligatoria durante todo el período estival a la espera de que el mercado televisivo se reactive con el nuevo curso. Esta medida está todavía siendo negociada con los representantes de los trabajadores. El objetivo es que la plantilla se coja vacaciones no remuneradas (en las que si seguirá abonando la parte correspondiente de la cotización social) hasta que haya nueva carga de trabajo para las productoras. Por otro lado, los 150 del área corporativa se les ha propuesto excedencias y bajas voluntarias mediante permisos temporales no retribuidos. En este caso la baja mínima es de cinco días y se aplicará con total voluntariedad.
Estas medidas puntuales llegan después de que en el inicio del presente ejercicio Vocento anunciara un severo plan de eficiencia. Puso en marcha un plan de restructuración que ha costado al grupo en torno a 20 millones de euros implicando una reducción de la plantilla en una cifra superior a los 300 trabajadores. En torno a 160 de los contratos que se rescindieron corresponden a Punto Radio, red de emisoras que en los primeros días de enero se incorporaron en cadena a Cope.
Operación de venta frustrada
Veralia dejó hace meses de estar en el mercado tras mucho tiempo intentando una venta que no llegó a cuajar. Fuentes del sector explicaron que la compañía cotizada mantuvo contactos con varios bancos de inversión y, de hecho, Santander tuvo en su cartera una posible operación de compra-venta estimada en torno a los 40 millones de euros. Fondos internacionales y compañías españolas pujaron por Veralia, pero las ofertas se quedaron muy por debajo de las aspiraciones de Vocento.
Las principales compañías de medios de comunicación españolas son incapaces de poner remedio a la hemorragia de números rojos que cada trimestre pone de manifiesto pérdidas millonarias. Los resultados del inicio de 2013, pese a los duros ajustes laborales levados a cabo en el sector están muy alejados de la rentabilidad. En el primer trimestre, Vocento sufrió unas pérdidas que suponen algo más que duplicar las registradas un año atrás. Pasó de apuntarse menos 7,6 millones de euros respecto a los 3,3 anotados en 2012. La compañía registró durante los tres primeros meses del año un resultado bruto de explotación ajustado (Ebita comparable) de 2,1 millones de euros, lo que supone una caída del 69,8 por ciento en relación al mismo periodo del año anterior debido al deterioro del mercado publicitario, a pesar de lo cual el grupo ha logrado mejorar su cuota en este mercado.