Hacía tiempo que la moda reclamaba la presencia de una figura potente sobre la pasarela, una mujer que sustentara su belleza exterior en una belleza interior aún más potente, y entonces apareció ella. Cara Delevingne, la modelo cuyos rasgos y forma de ser están marcando esta década en el mundo de la moda y de la cultura popular, cumple 23 años este 12 de agosto.
Aunque hay quien ha comparado su figura con la de Kate Moss, lo cierto es que las dos no podrían ser más diferentes. Aunque las dos sean londinenses, mientras la reina de los 90 era de un barrio humilde, Cara creció entre algodones como hija de un magnate inmobiliario y de una de las mejores amigas de Sarah Ferguson y su descubrimiento como modelo no fue en uno de esos encuentros casuales en un aeropuerto, sino una cuestión de sugerencias: al fin y al cabo, su padrino es Nicholas Coleridge, presidente de Condé Nast Internacional, la empresa editora de algunas de las principales revistas de moda del mundo, y tiene como madrina a la actriz Joan Collins.
Sin embargo, el éxito de Cara no solo tiene que ver con sus contactos familiares. Una vez aupada a la fama, ha sabido cómo definir su imagen personal, creando una marca propia que va mucho más allá de la pasarela y que refleja todo un estilo de vida que se transmite a través de las redes sociales. Cara es la reina de la pasarela y de los anuncios, pero también ocupa el trono de Instagram. Como ninguna otra en los últimos años, ha sabido convertir su imagen en la de toda una generación, adaptando los valores inconformistas tan propios de la juventud al lenguaje de los nuevos medios.
Cara es la pija que aprendió a ser rebelde (dicho de otro modo, es una punki de palo), pero sabe lo que se hace. Sus ganancias ya se cuentan por millones de euros anuales (más de 3 millones de euros en 2013, de acuerdo con las cuentas de su compañía, Cara & Co, y una estimación de más de 9 millones en 2014) y su carrera se está diversificando: ya ha hecho sus primeros pinitos en el cine (presentó en Madrid su película Ciudades de papel el pasado mes de junio) e incluso ha grabado alguna que otra canción con otro de los niños bonitos del showbiz, Pharrell Williams.
Los 23 años le llegan llenos de proyectos y con el corazón ocupado. Aunque hace pocas semanas varios medios avanzaron la ruptura de Cara con su novia, la cantante St. Vincent, lo cierto es que las dos no han dejado de regalarse muestras de afecto a través de las redes sociales durante los últimos días. La relación entre ellas comenzó hace unos ocho meses, después de la ruptura de Cara con la actriz Michelle Rodriguez, con la que mantuvo un sonado romance en 2014.
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