La filial española de Renault que dirige José Vicente de los Mozos buscó primero apoyos en el Gobierno -antes de iniciar conversaciones con los sindicatos- para luchar por que España ganara a sus rivales, Francia y Turquía, el Plan Industrial 2014-2016 que Francia iba a adjudicar entre sus centros más competitivos. Las fábricas españolas entraban en competición contra Francia y Turquía, fundamentalmente. Perder un contrato así suponía perder unos 1.000 empleos, y elevar la incertidumbre de los recortes de producción que sufren las fábricas en España.
Tras coordinarse los gobiernos (central y regionales), el pasado 20 de septiembre, el Gobierno envió un acuerdo de intenciones a la dirección general de Renault. Este paso lo confirmó este miércoles la ministra de Empleo Fátima Bañez durante el anuncio oficila de esta adjudicación.
Aunque los responsables de Renault no quisieron desvelar el contenido de estos acuerdos "por pertenecer al ámbito privado", fuentes conocedoras explican que el Gobierno mostró su voluntad de lograr ahorros de costes a la multinacional en capítulos como logística, transporte, energía, durante todo el proceso. "Renault seguirá encontrando aquí todas las facilidades que merece para el desarrollo de su negocio", decía este miércoles el presidente Mariano Rajoy.
También se habló de ello, en la visita del presidente de Renault, Carlos Ghosn, a España, confirmó Bañez.
Luego vino el acuerdo con los sindicatos para ahorrar costes laborales en la nueva producción. El presidente del Gobierno y los ministros de Industria y Empleo, presidente de la Junta de Castilla y León... Todos felicitaron este miércoles, durante la visita a la fábrica de Renault en Palencia, a empleados y sindicatos de Renault por ser piezas claves en la adjudicación del plan de creación de 1.300 empleos. Lograron cerrar en tiempo récord un acuerdo social (flexibilidad y abaratar la mano de obra de los 1.300 empleos nuevos) y conseguir así que España ganara la adjudicación de nuevos productos por parte de su matriz francesa.
¿Inversión...? Aún hay que echar números
La buena noticia es que España contará con una mayor carga de trabajo en sus fábricas y una fuerte inversión. Aunque la compañía aún está cerrando la inversión prevista, la cifra será importante (cientos de millones de euros) porque el plan implica la adjudicación de dos nuevas plataformas.
La reciente decisión, que ha levantado una gran polémica en Francia (el estado francés controla Renault con un 15,7%), dará empleo y continuidad a las tres fábricas españolas, dos aspectos claves en la actual incretidumbre y crisis que vive el sector y el país. Para suavizar la polémica con Francia, que está empezando a negociar con sus sindicatos nuevos ajustes laborales, De los Mozos reiteró que Francia es el principal centro de producción del grupo.