Parece que el sistema de etiquetas de la DGT para calificar la contaminación de los vehículos sigue causando estragos. En un principio el propio organismo dirigido por Pere Navarro ya admitió, incluso, que había vehículos a los que se les había denegado una pegatina que sí les correspondía. Y eso por no hablar de otro tipo de distintivos ilegales que se están comercializando a raíz de esto.
No es la primera vez que se dice que hay ciertos turismos con etiqueta ECO que pueden llegar a contaminar más que un diésel o gasolina. Ahora, ha sido la Organización de Consumidores y Usuarios quien ha reabierto el debate. Y es que la OCU ha denunciado que este tipo de pegatina de color azul y verde y que tiene permitido saltarse algunas de las restricciones de Madrid Central no es más que un "reclamo comercial" de las marcas.
En este sentido, ha advertido que algunos vehículos microhíbridos o mild-hybrid (que son los que portan la ECO) son más nocivos para el medio ambiente que un coche diésel o gasolina con distintivo C, que sería la más contaminante.
La OCU sostiene que muchos de estos tipos de vehículos son coches grandes, muy potentes y con alta contaminación. Por tanto, aunque se reduzca un 10% las emisiones gracias al sistema de hibridación suave, estas siempre serán más altas que las de muchos modelos con etiquetas C y motores de poca potencia.
Qué son los microhíbridos
Los microhíbridos son vehículos con motores de combustión a los que se les añade un sistema eléctrico de 48 voltios, que proporciona un ahorro de aproximadamente el 10% de consumo de combustible y, por tanto, logran una reducción del 10% de las emisiones de dióxido de carbono (CO2) y óxido de nitrógeno (NOx).
"La etiqueta ecológica se ha convertido en un reclamo comercial de las marcas que aprovechan el menor coste de los microhíbridos frente a otras tecnologías menos contaminantes para vender este tipo de modelos claramente favorecidos por el sistema de concesión de etiquetas ecológicas, aunque en muchos casos sean en realidad más contaminantes que otros vehículos más baratos", advierte la organización.
El sistema de las etiquetas de la DGT es "injusto"
En este sentido, considera que el actual sistema de concesión de etiquetas es "injusto", pues, en su opinión, está basado en las tecnologías del motor y no en las emisiones reales de los vehículos.
No obstante, cree que es un "buen paso inicial e importante" para concienciar a los conductores de la contaminación. Además, pone de manifiesto que no hay datos oficiales sobre las emisiones reales de los contaminantes que perjudican a la salud (micropartículas y NOx), subrayando que el sistema "favorece a unos vehículos en perjuicio de otros sin un criterio objetivo".
"El sistema de etiquetas ambientales condiciona el acceso de los ciudadanos a las áreas de circulación restringida de las grandes ciudades, discriminando en este caso a los dueños de coches que, aunque contaminan menos, tienen una etiqueta peor", apunta.
En este sentido, OCU cree que debe revisarse el sistema de concesión de etiquetas medioambientales para que estas puedan cumplir con su objetivo.
