Es el más pequeño de los monovolumen de Ford, un modelo que llega para sustituir en cierto modo al Ford Fusión que tan poco éxito cosechó en nuestro mercado. Pero lo hace con un modelo mucho más atractivo desde todos los ángulos, empezando por un diseño mucho más personal en el que destaca por encima de todo su particular sistema de apertura de puertas traseras y por la ausencia de pilar central, siendo el único modelo ahora mismo que tiene este sistema. Por ello, los cinturones de seguridad para conductor y acompañante van integrados en la estructura de los asientos, a la altura del hombro.
Para su desarrollo se ha partido de la plataforma del Fiesta, con unas dimensiones de 4,06 metros de longitud y 1,59 metros de altura, lo que supone 12 centímetros más largo y más alto que el Fiesta. La estructura de las puertas ha sido reforzada y, cuando están cerradas, hacen entre ellas las funciones de pilar central, asegurando la rigidez necesaria. La ausencia de montante entre ambas filas de asientos y la posibilidad de plegar el respaldo del asiento delantero del acompañante permite una gran facilidad de acceso al interior, tanto de pasajeros como de carga, con más de metro y medio de espacio cuando abrimos la puerta delantera y la trasera, prácticamente el doble que en un Fiesta de cinco puertas. El maletero tiene una capacidad de casi 320 litros, algo por debajo de la media en el segmento, y resulta algo estrecho en sus formas interiores para cargar objetos de cierto tamaño.
La posición de conducción es más elevada que en el Fiesta, aportando una gran visibilidad y confort en la conducción. Inicialmente se puede elegir entre tres motores de gasolina —1.0 EcoBoost de 100 CV, 1.6 automático de 105 CV y 1.0 EcoBoost de 120 CV— y dos Diesel TDCi—1.5 de 75 y 1.6 de 95 CV—, todos ellos con cambio manual de cinco velocidades, salvo el 1.6 automático que tiene seis.
Los dos motores EcoBoost son de tres cilindros con turbocompresor, y destacan por su altísima eficacia y su agradable funcionamiento. Con apenas 1 litro de cilindrada, ofrecen una gran facilidad para mover el B-Max a muy buen ritmo y, sobre todo, unos consumos muy ajustados, homologando apenas 4,9 l/100 km.
El motor 1.5 TDCi de 75 CV es nuevo en la gama Diesel de Ford y deriva del propio 1.6 TDCi. No es tan agradable en su funcionamiento como el gasolina EcoBoost, pero tiene un consumo medio de 4,1 l/100 km.
El B-Max se vende con tres niveles de equipamiento, Trend, Titanium y Titanium X, y desde la primera de ellas ofrece de serie seis airbags, control de estabilidad, control de presión de los neumáticos, retrovisores eléctricos, ayuda al arranque en pendiente y ordenador de viaje. Toda la gama cuenta con un descuento oficial de 1.000 euros.
GAMA Y PRECIOS desde:
1.0 EcoBoost 100 CV: 16.900 euros
1.0 EcoBoost 120 CV: 17.700 euros
1.6 Ti-VCT 105 CV: 18.300 euros
1.5 TDCi 75 CV: 17.700 euros
1.6 TDCi 95 CV: 18.300 euros