El PSOE, cuando ha estado en el gobierno, ha puesto bajo indudable presión la sostenibilidad de las pensiones públicas, pero es cuando está en la oposición cuando su actitud es todavía más irresponsable. No sé si los propios socialistas ignoran que su reciente propuesta impositiva para consolidar el sistema de pensiones no es en absoluto viable y, por tanto, no tienen a ningún experto en fiscalidad y finanzas públicas, o si sí lo saben y se limitan a hacer demagogia.
Empecemos por lo obvio: el déficit de la seguridad social asciende a unos 15.000 millones de euros al año. Esto quiere decir que con las cotizaciones sociales no conseguimos pagar las pensiones y los gastos de gestión del sistema. Efectivamente, podríamos pagar los gastos de gestión del sistema con impuestos. Estos gastos ascienden a unos 4.000 millones de euros al año. Obviamente, esto supondría aumentar el déficit de la Administración General del Estado en unos 4.000 millones: a nivel consolidado no arreglamos nada, pero tampoco es una medida criticable.
Ahora bien, nos siguen faltando unos 11.000 millones de euros al año. Esto se puede resolver subiendo impuestos, pero el coste y el esfuerzo son muy considerables. Pensemos que, según datos oficiales de la Agencia Tributaria, todas las subidas de impuestos de Rajoy y Montoro en 2012 (Renta, Patrimonio -restablecido por el PSOE pero aplicado en 2012-, IVA, Impuestos Especiales…) supusieron 11.097 millones de euros de incremento de recaudación, incluyendo la correspondiente a la amnistía fiscal. Eso sí, esta brutal subida de impuestos, parcialmente impuesta por el rescate financiero, es una de las causas de que la economía profundizase en la recesión económica.
Lo que se pretende es gravar un elemento enormemente móvil como las transacciones en los mercados
Lo que no es serio, y denota o ignorancia o demagogia (o ambas conjuntamente) es pretender recaudar una cuantía de este estilo sin afectar en nada a los bolsillos de la clase media y trabajadora. Ésta era la propuesta de Pedro Sánchez el domingo, y ayer se conocieron los “detalles”: simplemente con que los bancos y los especuladores paguen bastaría. En consecuencia, el PSOE propone financiar el déficit del sistema de pensiones, es decir, el desfase del gasto público más importante, sólo con un impuesto a la banca y la implantación del impuesto a las transacciones financieras.
Empezando por este último, lo que se pretende es gravar un elemento enormemente móvil como son las transacciones en los mercados financieros. Aquí sí se plantea un impuesto que acabará trasladándose en cascada a todos los ciudadanos, ya que cualquier operación hoy en día en los modernos mercados de capitales pasa por varias transacciones. Recordando a Adam Smith sobre este tipo de impuestos, como la Alcabala castellana: “En la nación en la que funciona un impuesto de esta clase no es posible producir nada para venderlo en el mercado”. Para el economista (e inspector de Hacienda y comisario de Aduanas) escocés, según detalla en su obra La Riqueza de las Naciones, en este tipo de ideas fiscales estaba el origen de la decadencia española.
Por otro lado, si sólo aplicamos este impuesto en España como propone el PSOE, simplemente las operaciones se desplazarán a otros mercados financieros. Esto ya no es doctrina, es simplemente lo que les pasó a los suecos cuando lo implantaron.
La tasa para operaciones en bolsa existe en UK y antes del Brexit recaudaba 3.000 millones de libras
La única posibilidad seria es implantar una tasa para operaciones en bolsa. Esto existe en el Reino Unido, y antes del Brexit conseguía una recaudación de unos 3.000 millones de libras. Dado el tamaño del mercado español, con un volumen que no supera un 25% del London Stock Exchange, no podremos conseguir más allá de 750 u 800 millones de euros, sin un riesgo grave de perjudicar a nuestros mercados financieros.
Bastante más disparatada es la idea de un impuesto a la Banca. Ahora mismo, la Banca en España apenas gana dinero y no se ha recuperado de las brutales pérdidas de la crisis. De hecho, el Estado ha garantizado más de 30.000 millones de euros, de los más de 50.000 millones que tiene el sistema financiero en créditos fiscales. Se lo traduciré al lector, hasta 2013, la Banca tuvo pérdidas de unos 170.000 millones de euros, que al 30% de tipo del impuesto de sociedades (para los bancos) supuso 51.000 millones de menores impuestos a pagar en el futuro. ¿Por qué? Porque la Banca absorbe las pérdidas de los demás sectores a los que ha concedido créditos cuando estos se impagan.
El PSOE no ha hecho las cuentas, hundiría el sistema financiero y provocaría fuga de capitales
Por supuesto, los balances bancarios, pese al rescate de más de 60.000 millones a cargo de fondos públicos, no se han recuperado como para pagar 10.000 millones de euros más al año de impuestos. Pensemos sólo en que Bankia, el banco más capitalizado de España acaba de colocar un 7% de su capital por debajo de su valor en libros, o que el Banco Popular se acaba de adjudicar por un solo euro.
En fin, el PSOE no ha hecho las cuentas, y pretende garantizar las pensiones hundiendo el sistema financiero y provocando una fuga de capitales. Lo que debería hacer es fomentar el empleo: por ejemplo, desbloqueando el complemento salarial garantizado que ha conseguido Ciudadanos para 800.000 jóvenes, a cargo de fondos europeos, y bloqueado conjuntamente, como otras reformas de Cs que mejoran la vida de los españoles, por el PP y el PSOE.
En Ciudadanos creemos que las pensiones se garantizan con más y mejor empleo, y no con subidas de impuestos, pero, para la izquierda que pretende otras soluciones, lo mínimo que se podría pedir son impuestos que se puedan cobrar, y no pura y simple demagogia.
Francisco de la Torre Díaz. Diputado y responsable de Hacienda de Ciudadanos. Inspector de Hacienda (SE).