Escuchando a Pedro Sánchez, a los miembros de su Gobierno y a sus demás portavoces, uno podría llegar a creer que con su llamada política social estaría haciendo una España mejor en la que la población económicamente vulnerable es cada vez menor, en la que aquellos que tienen necesidades económicas básicas insatisfechas son progresivamente menos y en la que cada vez son más los que, progresando en la escala social, alcanzan un estadio mínimo de bienestar. Según nos cuentan, su política estaría siendo clásicamente retributiva al detraer recursos a los que pueden aportarlos para hacerlos llegar a los que los necesitan, mantra que repiten una y una vez por aquello de que lo reiterado muchas veces acaba pareciendo verdad.
Es indudable que la primera parte de la ecuación sí la están cumpliendo pues la detracción de recursos a los que pagan impuestos no ha dejado de crecer desde que gobierna Sánchez. Sin ir más lejos, en 2022 (año de referencia por lo que después se expone) la Agencia Tributaria detrajo a los españoles un 14,4% más que en 2021, porcentaje que supuso recaudar 31.000 millones de euros más. Luego sí, efectivamente el Gobierno de Sánchez aumenta su exigencia fiscal.
Otra cosa es lo referente a la segunda parte de la ecuación porque, digan lo que digan Sánchez y los suyos, el destino dado a los recursos obtenidos mediante los aumentos de la fiscalidad no están consiguiendo lo que ellos dicen perseguir. Los datos son elocuentes y pueden percibirse observando los resultados de la Encuesta de Condiciones de Vida que anualmente publica el Instituto Nacional de Estadística. Esta encuesta se elabora con criterios armonizados comunes a toda la Unión Europea y proporciona los resultados de cada año en base a los ingresos por persona y/o familia del año anterior. Pues bien, según reflejan sus datos de 2023 -obtenidos con los ingresos de 2022- la tasa de pobreza existente en España en 2023 es prácticamente la misma que en 2022 con una insignificante reducción del 0,1% (20,2% frente a 20,4%). Y para alcanzar tan exiguo resultado, en el citado 2022 Sánchez nos subió los impuestos en los citados 31.000 millones de euros, un 14,4%.
Debe afirmarse que no es tan cierto que los gobiernos socialistas detraigan recursos a los que tienen para hacérselo llegar a los que no tienen como que expolian a los que tienen -a este paso, tenían- para quedárselo los políticos
La interpretación de las cifras no ofrece excesiva dificultad. Pese al aumento del sacrificio fiscal que se nos exige, Sánchez apenas ha conseguido reducir la pobreza existente en la población española. Su Gobierno está disfrutando de cifras récord de recaudación, pero sus políticas están demostrándose incapaces de reducir el drama de la pobreza en España. Nuestros gobernantes zurdos (Milei dixit) utilizan los aumentos de los recursos públicos para cualquier cosa menos para lograr que la población económicamente vulnerable deje de serlo. Se desmonta así el mantra de los falsos progres y, recogiendo la idea feliz de Daniel Lacalle, debe afirmarse que no es tan cierto que los gobiernos socialistas detraigan recursos a los que tienen para hacérselo llegar a los que no tienen como que expolian a los que tienen -a este paso, tenían- para quedárselo los políticos.
Pero la encuesta ofrece otros datos desagregados también muy relevantes. Así, resulta que la mayor reducción de la tasa de pobreza tuvo lugar en la Comunidad Autónoma de Madrid (12,8%). Ya ven, les pese lo que les pese a los profetas de nuestra falsa progresía, las políticas de Díaz Ayuso logran resultados sociales infinitamente mejores que las aplicadas por el Gobierno “progresista” de Sánchez. Todavía más, si se observa lo sucedido en la mayor Comunidad Autónoma regida por los socialistas -la Valenciana gobernada por Ximo, el del timo- puede comprobarse que. en dicha región, según los ingresos de 2.022 la tasa de pobreza aumentó en un 9% 2.023. El contraste no puede ser más elocuente, la política popular de Ayuso disminuyó la pobreza -y bastante-, mientras que la política socialista de Ximo Puig la aumentó, y también bastante.
El falso discurso político
A la vez, las matemáticas permiten hacer un ejercicio ciertamente ilustrativo. Si se elimina el dato de la Comunidad de Madrid resulta que, con los datos de ingresos de 2.022, en el resto de España la tasa de pobreza ha aumentado en 2.023 en torno al 0,07%. Expresado de otra forma, en el año y con los datos considerados, toda la reducción de pobreza habida en España se debe exclusivamente a la disminución habida en la Comunidad Autónoma de Madrid pues en el resto de España ha aumentado la población incluida en la citada tasa. Eso dicen los datos y, consecuentemente, esa es la realidad. Eso sí, los zurdos españoles (vuelvo al término empleado por Milei) no permitirán que la realidad les destroce su falsario discurso político.
ma
No creo que el PP se haya distintinguido por erradicar la pobreza, los empresarios peperos se niegan a contratar trabajadores por encima de los 45 años, con Rajoy elevó la edad hasta los 55 años para recibir un miserable subsidio de subsistencia, con Aznar empezó la barra libre para dejar pasar millones de emigrantes, que han dejado fuera del mercado de trabajo a muchos trabajadores humildes. Y encima los medios peperos se hartan de cargar contra subsidios de hambre mientras las empresas pepetas reciben cantidades ingentes de dinero. Por qué la Caixa o Mercadona han tenido que recibir millones de euros de fondos públicos?, encima echando a la calle a todos los trabajadores de cincuenta años que han podido
Perhaps
No es Sánchez, sino el socialismo. El socialismo consiste en quitar la riqueza al que la tiene para que el gobierno pueda hacer lo que quiera con ella. No sé si se fija usted pero en ninguna parte aparece el principio de creación de riqueza, sólo el de quitar la riqueza. Socialismo es pobreza por definición y por realidad. Para disminuir la pobreza habría que facilitar e impulsar la creación de riqueza en las zonas deprimidas, en lugar de prohibir la minería de elementos raros (entre otros centenares de ejemplos). Para disminuir la pobreza hay que facilitar el empleo que permite, por pura presión competitiva, subir los salarios. Pero primero hay que CREAR trabajo y CREAR riqueza. ¿En qué parte de la ideología socialista habla de crear empleo?, hablan de molestar al empresario, no en facilitar el trabajo de autónomos y pequeñas empresas. No es Sánchez, o no sólo Sánchez, es el socialismo y mucho peor el comunismo de este gobierno.
Birmania
Depende, la suya y la de su familia si la disminuye.