Desenlace feliz para los vecinos del distrito madrileño de San Blas. Después de meses de protestas exigiendo al Ayuntamiento de Madrid que no ceda al Opus Dei una parte de la Quinta de Torre Arias, una preciosa finca solariega de finales del siglo XVI, de más de 180.000 metros cuadrados, cedida por Tatiana Pérez Guzmán el Bueno para "uso y disfrute de los madrileños", la Universidad de Navarra ha descartado crear una nueva sede en dicho emplazamiento.
En su decisión han influido varios factores, incluyendo la presión vecinal, aunque ha predominado el económico, tal y como ha adelantado la propia universidad a este periódico. "El edificio perteneciente a la Quinta era un lugar atractivo, sobre todo por el entorno del parque, pero pensamos que en este momento se pueden encontrar en Madrid otras opciones más económicas, que tengan una tramitación administrativa más sencilla y que nos permitan disponer de espacios más amplios".
La institución educativa sabía de antemano que "el coste de la rehabilitación no será precisamente pequeño " y en sus previsiones de gasto se contemplaba un desembolso de alrededor de 20 millones de euros.
Continúan buscando sede
Pese a rechazar una posibilidad que la prestigiosa universidad vinculada al Opus Dei había estudiado desde principios de año y que la propia Ana Botella veía con buenos ojos pero que ha quitado el sueño a muchos vecinos madrileños, el vicerrector de Ordenación Académica, Borja López-Jurado, asegura que seguirán buscando "una sede estable y amplia en la capital" donde ampliar su oferta de másteres.
"La Universidad ha estudiado esa posibilidad pero finalmente ha decidido descartarla"
Aunque por el momento tendrá que esperar, la nueva sede se sumaría a la que ya tienen en la calle Zurbano, en la que imparten posgrados, a la clínica privada muy cerca de Plaza Castilla y a la elitista escuela de negocios, IESE Business School, en el selecto barrio de Aravaca. Recientemente han estrenado un nuevo local en la calle García de Paredes, que acogerá a los alumnos del máster en Banca y Regulación Financiera.
La finca de Torre Arias era su opción preferida por tratarse de un entorno similar al campus de Navarra, algo que no compartían los vecinos del barrio, contrarios a ceder las edificaciones a ninguna institución privada.