España ha retrocedido más de una década en materia de políticas sociales por los recortes que el Gobierno ha llevado a cabo durante el último año. Según el 'Informe España 2012' de la Fundación Encuentro, el gasto en políticas de bienestar es similar al destinado en 1996 y 2003, cuando España se situó a niveles de los países del Este y Estados Unidos.
En la década de los 80, el gasto social en España se mantenía en torno al 15%-18% del PIB, para aumentar hasta el 22% en los años 90. En 2003 cayó de nuevo al 18% y después aumentó hasta el 25% de 2009. Sin embargo, los recortes producidos entre 2011 y 2012 han vuelto a deprimir el gasto social, según los autores del informe.
A medio y largo plazo, los recortes en Educación y Sanidad alejarán a España de la pauta de bienestar europea y podrían tener graves efectos sociales, semejantes a los detectados en Estados Unidos, donde se han elevado las tasas de delincuencia y discriminación, además de empeorar la salud de los inmigrantes y reducir las oportunidades de sus hijos, entre otras consecuencias.
Entre otras recomendaciones, el estudio apuesta por invertir en el acceso universal a una atención comunitaria integrada de calidad que sea "barata y efectiva", incentivar el acceso a la atención comunitaria de inmigrantes y población sin recursos, reforzar la inversión en salud pública y formación de profesionales sanitarios y reorientar el Estado de bienestar hacia el modelo nórdico, basado en una mayor presión y redistribución fiscal y el desarrollo de políticas familiares y de infancia, discapacidad y dependencia.