Rafael Nadal se clasificó para la final del torneo de Pekín después de que su rival, Tomas Berdych, abandonara por lesión. Ese resultado conlleva que el español vuelva a ser, dos años y medio después, al número 1 del tenis mundial.

La organización del Masters 1.000 de Shanghai tuvo que emitir este lunes un comunicado para certificar que los jugadores que participan en el torneo están seguros y a salvo. Salen así al paso después de la amenaza de muerte que recibió el número uno del mundo cuando alguien escribió en Twitter: "Planeo asesinar a Federer el 6 de octubre para exterminar el tenis".