Si ustedes ven en la tele un partido de tenis con las gafas puestas del revés, o todavía mejor con unas gafas que no son suyas, es posible –solo posible– que vean, además de la pantalla distorsionada, algunas imágenes extrañas y fugaces. Una de ell

Yo prefería el tiempo en que los políticos trataban de convencerme. A mí. A todos por igual. Escuchabas y elegías lo que te parecía mejor