La sorprendente elección de Ángel Martín Peccis como nuevo embajador en Cuba gracias al expreso deseo del ministro de Transportes, José Luis Ábalos, ha provocado malestar e indignación entre un buen número de embajadores del Ministerio de Asuntos Exteriores, según ha constatado Vozpópuli, ya que consideran que el primero tiene un "pobre" currículum que no le hace merecedor de un puesto tan sensible y codiciado dentro de la diplomacia española.
"Ese currículum no da la talla", subraya un veterano diplomático del hasta ahora director de la oficina en Colombia de la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI) y después de que este periódico desvelase quién estaba detrás del polémico nombramiento de Peccis.
La plaza de embajador en La Habana era ambicionada por varios directores generales del propio Ministerio de Asuntos Exteriores después de que a principios de septiembre se adelantase que iba a haber cambios en varias capitales iberoamericanas, así que pocos se han mostrado indiferentes al conocerse la influencia de Ábalos en dicho nombramiento.
Un aspecto que "preocupa", según las citadas fuentes, es la "aparente debilidad" que ha mostrado Arancha González Laya en este asunto cuando el titular de Transportes le puso encima de la mesa el nombre de Peccis. "No se puede dejar imponer una embajada como esa por un compañero del Ejecutivo", subrayan.
Laya llegó al Consejo de Ministros con un perfil técnico labrado durante años de trabajo en organismos internacionales como la UE o la ONU. Fue una elección personal de Pedro Sánchez, obsesionado por impulsar la diplomacia económica. Pero a diferencia de su predecesor, Josep Borrell, la actual jefa de la diplomacia no cuenta con aliados en el PSOE.
Varios de los diplomáticos consultados por este diario se preguntaban este lunes qué hubiera pasado si Ábalos le hubiese intentado imponer a Borrell un nombramiento como el de Peccis en una embajada tan importante como la de Cuba.
"Disconformidad" con el nombramiento
La Asociación de Diplomáticos Españoles (ADE), que engloba a más del 70% del total de miembros de la Carrera Diplomática, ya expresó la semana pasada su "preocupación" por la elección del nuevo embajador en La Habana, al tratarse del quinto de carácter político. Los otros cuatro son Ángel Ros (Andorra), Juan Andrés Perelló (Unesco), Manuel María Escudero (OCDE) y Carmen Montón (OEA).
"Reconociendo la competencia y la discrecionalidad del Gobierno en materia de nombramiento de titulares de Embajadas, y en la línea de comunicados anteriores emitidos con distintos gobiernos, queremos manifestar nuevamente nuestra disconformidad con el nombramiento de Embajadores denominados 'políticos', es decir, no pertenecientes al cuerpo de funcionarios de la Carrera Diplomática", subrayó la ADE.
El principal sindicato de diplomáticos recordó que los miembros de la Carrera Diplomática tienen "un alto grado de idoneidad, experiencia acumulada y acreditada competencia profesional para desempeñar" las funciones de jefe de misión "con total eficacia y lealtad al Gobierno de turno en defensa de los intereses de España y de nuestros nacionales".
Tras aparecer el nombramiento de Peccis en el BOE, la ADE advirtió de que el nombramiento de embajadores 'políticos' "merma las naturales aspiraciones profesionales de nuestros asociados, basadas en los principios de mérito y capacidad invocados para el acceso a la Función Pública" tras una dura oposición.