A finales de junio la DGT dio inicio a su campaña de verano con el lema 'este país no puede soportar más muertes'. Buscando bajar los accidentes de tráfico se desplegaron 1.324 puntos de control divididas de la siguiente forma: 764 radares fijos, 548 radares móviles y 12 helicópteros.
Durante el verano es muy común tomarse unas vacaciones y realizar un viaje a distintos pueblos o ciudades españolas. La prisa por llegar al destino puede generar que muchos conductores excedan los límites de velocidad (120km/h en autovías y autopistas, 90km/h en carreteras convencionales y 50km/h en zonas urbanas), aumentando las probabilidades de algún accidente.
La localización de los radares que utiliza la DGT es pública. Lo han hecho a través de una lista en la que se pueden ver las distintas ubicaciones exactas en las que tienen los cinemómetros. A pesar de tener esta lista, poder contar con un GPS que te indique las localizaciones de los mismos, e incluso carteles de advertencia que se pueden ver antes de llegar a estos, es más complicado detectar los radares móviles.
El documento también muestra una 'ubicación estimada' de los radares móviles, que pueden ubicarse en un rango de entre cinco y cien kilómetros. La amplia distancia espacial en la que se pueden ubicar, sumado a que en muchas ocasiones su localización pasa desapercibida, ya sea por estar en un lugar poco visible, o en un coche camuflado, tener noción de dónde podrían estar los radares te ayudará a evitar que las multas puedan arruinar tus vacaciones de verano.
Una de las prácticas más comunes que tiene la DGT es la de colocar un un controlador de velocidad luego de un radar fijo, de esta forma pueden detectar los coches que bajan la velocidad antes de llegar al radar e inmediatamente presionan el acelerador, por lo que no debes confiarte de las señales que están a simple vista.
La mayor concentración de estos dispositivos se encuentran en las autopistas y autovías, lugar donde las velocidades máximas son mayores. De igual forma, un punto muy común para los radares son los accesos de incorporación a las carreteras, puntos en las que los cambios de velocidad son muy necesarios y por lo tanto, suelen estar frecuentado por radares fijos y móviles.
Recomendaciones para evitar multas
A pesar de que la forma ideal para evitar las multas es mantenerse dentro de los rangos de velocidad permitidos, la empresa SPG Talleres, ha dejado algunas recomendaciones para evitar las multas este verano.
- Consultar la lista de radares de la DGT.
- Usar avisadores de radar.
El uso de estos dispositivos es legal, sin embargo, los inhibidores de radares sí son ilegales y pueden causar una multa de hasta 6.000 euros.
- Estar atentos a las patrullas policiales, radares en trípode o helicópteros Pegasus.
- No confiarse tras pasar un radar.
- Localizar apartaderos, incorporaciones o entradas de camino.