El Gobierno ve muy complicado convocar la mesa de diálogo con la Generalitat en julio. La agenda de Pedro Sánchez es imposible. El jefe del Ejecutivo afronta las elecciones vascas y gallegas el 12-J, otra cumbre con Ciudadanos en el Palacio de la Moncloa y dos consejos europeos para negociar la cuantía y condiciones de los fondos de rescate que recibirá España para afrontar la crisis económica del coronavirus.
A las estrecheces del calendario y la importancia de las citas en Bruselas, se suma la guerra abierta entre Junts per Catalunya (JxCat) y ERC. El presidente de la Generalitat, Quim Torra, sigue sin mojarse con la fecha, a pesar de que ERC da por hecho que la reunión tendrá lugar antes del 15 de julio.
Fuentes de Moncloa aseguran a Vozpópuli que el presidente "mostró su disposición a julio". Sánchez dijo el domingo que estaba dispuesto a reunirse en las fechas que propone ERC, aunque tampoco fue tajante. Y dejó la puerta entreabierta a cambios de fechas en función de las condiciones sanitarias y la evolución de la covid-19.
"Lo he dicho en muchas ocasiones, desde luego no tendré ningún problema en que se celebre (la mesa) en el mes de julio, entre otras cosas porque significará que esta emergencia sanitaria está definitivamente superada, que será una extraordinaria noticia para todos", aseguró Sánchez.
Fondo europeo y cumbre con Cs
Pero en el seno del Gobierno hay muchas dudas de que esta fecha sea realmente viable. Julio es un mes complicado políticamente para el presidente. En primer lugar, hay elecciones autonómicas en el País Vasco y Galicia. Y se da por hecho que la mesa no se reunirá antes de las urnas. Pero que es después de esa fecha, el presidente debería encajar la mesa entre otras citas capitales para el Gobierno.
Las más importantes son en Bruselas, sea o no en formato virtual. Julio marca el arranque del semestre de presidencia alemán de la UE. Y la canciller, Angel Merkel, se ha marcado como objetivo culminar la negociación de los fondos de reconstrucción europeos antes de agosto.
Los 27 tienen previsto reunirse en sendos consejos europeos que dirimirán el reparto de ayudas entre los distintos países y las condiciones de acceso a este rescate blando de las economías europeas más castigadas por la pandemia. Las reuniones entre los jefes de Estado y de Gobierno se celebrarán probablemente el 9 de julio y en la segunda quincena de julio. La fecha está todavía por determinar.
Además, el Gobierno se ha comprometido a celebrar otra cumbre con Ciudadanos como la que tuvo lugar en La Moncloa el pasado viernes. Sánchez no asistió a ese encuentro, que lideró la vicepresidenta Carmen Calvo. Y es probable que no participe en ellos mientras la líder naranja, Inés Arrimadas, se encuentre de baja maternal.
Guerra entre Torra y ERC
En Moncloa aseguran que la alianza con Ciudadanos no es incompatible con la mesa catalana, que es un compromiso de investidura con ERC. Pero otras fuentes creen que Sánchez prefiere priorizar ahora mismo el diálogo con la formación naranja. Y que la foto con Ciudadanos se producirá antes que la de los presidentes del Gobierno y la Generalitat. Otras fuentes consideran que Sánchez solo reunirá la mesa si verdaderamente lo necesita en una negociación presupuestaria.
A los problemas de calendario y el batiburrillo de socios se suma la batalla entre JxCat y ERC en el seno del Gobierno catalán. La única reunión de esta mesa se celebró a finales de febrero en Madrid después de semanas de tira y afloja entre Sánchez y Torra sobre la fecha definitiva. El compromiso fue que el segundo encuentro tuviera lugar en Barcelona. Pero el coronavirus frenó en seco todos los trabajos y comisiones paralelas pensadas para agilizar los trabajos de la mesa principal.
El presidente de la Generalitat lleva camino de repetir la estrategia de hace unos meses con tal de zancadillear a ERC. Torra se ha negado hasta el momento a dar julio por sentado. La portavoz del Gobierno catalán, Meritxell Budó, ha dicho este martes que la mesa debe reanudar sus trabajos, pero se ha negado a confirmar el horizonte temporal de ERC.
"En los próximos días veremos qué opciones tenemos", ha dicho.