La Fiscalía ha informado al juzgado que investigó el Delcygate que no hay base suficiente para reabrir la causa. El Ministerio Fiscal ha vuelto a oponerse a su reapertura –como ya hiciera en mayo tras publicarse una imagen de aquella madrugada- al considerar que las nuevas evidencias aportadas por la UCO y que salpican a Pedro Sánchez no arrojan indicios desde el marco del derecho penal.
El Ministerio Fiscal responde de esta manera a la solicitud de Vox de que se reabran estas diligencias que se siguieron en el Juzgado de Instrucción número 31 de Madrid. Su titular, Antonio Serrano-Arnal, decretó el archivo provisional a finales de 2020 al considerar que el objeto de la causa, relativo a la entrada en España de la vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez, no fue constitutivo de prevaricación, sino que se tenía que quedar en la vía administrativa.
Con todo, Vox solicitó al juez el pasado mes que reabriera estas pesquisas tras la incorporación en el marco del caso Koldo de un informe de la UCO que desvela nuevos detalles acerca de la visita en España de la ‘número dos’ de Nicolás Maduro. Entre otras cosas, evidencia que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, estaba al tanto de su presencia y que la misma la planificó el comisionista de la trama, Víctor de Aldama, con el beneplácito del entonces ministro de Transportes, José Luis Ábalos.
Las evidencias que apuntan a Sánchez
Sin embargo, para la Fiscalía estos indicios nada nuevo aportan desde la esfera del derecho penal. En su escrito, que avanza Vozpópuli, el Ministerio Público expone que este asunto se tiene que ceñir a la presunta “significación delictiva” de la presencia de Delcy Rodríguez en Barajas la madrugada del 20 de enero de 2020, toda vez que tenía prohibido pisar suelo europeo.
“Desde esta perspectiva y atendiéndonos a dicho exclusivo objeto, los hechos a los que se hace referencia en el escrito de solicitud de reapertura no inciden sobre la licitud o ilicitud de la presencia en España de la vicepresidenta venezolana ni sobre el conocimiento o autorización que pudo preceder su estancia en el aeropuerto madrileño. Es decir, no convierten en penalmente relevantes unos hechos que ya el TS entendió que tenían unos perfiles ajenos al Derecho Penal”, responde ahora la Fiscalía.
Al hilo, expone que las “actuaciones presuntamente delictivas” llevadas a cabo por Koldo García y el ‘conseguidor’ Aldama deben de investigarse en el marco en dicha causa, en la Audiencia Nacional. “Y es en ese procedimiento donde habrá de determinarse el alcance de dichas actuaciones, las personas que participaron o se beneficiaron de ellas, así como su significación penal, pero no justifican la reapertura de la presente causa, por lo que la solicitud formulada por la representación procesal de VOX ha de ser rechazada”, concluye.
Esta es la segunda vez en lo que lleva de año que la Fiscalía cierra la puerta a que los juzgados de Plaza Castilla investiguen una presunta prevaricación en relación con la visita a España de Delcy Rodríguez. Su presencia, que destapó este medio, fue desmentida entonces por el Ejecutivo, que negó que hubiera pisado suelo español. Sin embargo, las pesquisas impulsadas en este juzgado evidenciaron que no fue así y hasta el propio Tribunal Supremo –que abrió diligencias por una presunta responsabilidad penal de José Luis Ábalos- determinó que no se podía vincular una presunta vulneración cometida por una autoridad española con un delito de prevaricación. Por ese motivo, archivó también las diligencias para el entonces ministro de Transportes.
Fue un viaje planificado
Sin embargo, Vox considera que se pueden perseguir penalmente estos indicios puesto que evidencian, entre otras cosas, que no fue una escala en el marco de un vuelo largo. Los mensajes analizados a De Aldama demuestran que este conseguidor tenía una relación de “complicidad” con Rodríguez que se fue estrechando conforme se acercó la fecha de su llegada.
Ambos acordaron determinar que la visita se producía por motivos médicos y para acudir a la feria de Fitur. De hecho, Aldama planificó una agenda plagada de encuentros con empresarios como Rafael Chirino (socio suyo, también venezolano, con el que compartía negocios del sector del petróleo y la compraventa de diamantes) o el country manager de Duro Felguera, Dino Di Lanni.
Lo más relevante para la formación que lidera Santiago Abascal es que Ábalos estaba implicado en esta visita y que dio parte de la misma a Pedro Sánchez. Así consta en un mensaje que le remitió el entonces dirigente socialista. “La vicepresidenta de Venezuela viene en privado el lunes y quiere verme discretamente como continuación del encuentro que tuve con el ministro de comunicación (que es su hermano)”, le dijo.
Ábalos le trasladó que la “gestión” que acordaron en favor de las empresas españolas había permitido a Duro Felguera el cobro de una importante deuda, a lo que Sánchez respondió con un escueto “bien”. En ese momento Ábalos envió el pantallazo de la conversación a Koldo García, entonces asesor suyo, que estaba fraguando el viaje con Aldama y que le respondió: “Cuánto te quiero”. El exministro replicó: “Ya ves que no me ha dicho nada pero al menos no me pone pegas”.
Vox pide la reapertura del Delcygate
En su escrito de petición de reapertura, al que ha tenido acceso este medio, Vox explica que el propio Sánchez reconoció, tras desvelarse estos hechos, que tuvo conocimiento de la llegada de Delcy Rodríguez, y que se debería reabrir la causa para investigar los motivos por los que aterrizó en España, así como el contenido de las presuntas maletas que portaba el avión.
"Conforme recoge el informe de la UCO, de forma contraria a lo expuesto en el auto de sobreseimiento y archivo de las actuaciones, la Sra. Delcy no utilizó Madrid meramente como escala (lo cual ya sería ilícito), sino que tuvo una motivación concreta para estar en territorio nacional. Motivación que deviene en una conducta ilícita y que, por ello, debe ser investigada, porque en la misma colaboraron activamente del Gobierno y otras personas con determinada vinculación que debe ser determinada a efectos penales”, alegó el equipo jurídico de Vox.
Tras registrar el escrito, el magistrado Serrano-Arnal dio traslado del mismo a la Fiscalía para que “emitiera informe sobre la solicitud planteada”. Cabe recordar que el instructor también se negó a reabrir la causa el pasado mes de mayo y razonó, además, que no cabía iniciar una investigación “prospectiva” para investigar el contenido de las “supuestas maletas”.
Del mismo modo también declinó la petición del Senado de remitir las cintas sobre el Delcygate en el marco de la comisión de investigación constituida por el caso Koldo. El instructor recordó que “están protegidas con carácter reservado” y que las mantendrá bajo su juzgado. Como informó este medio, este material probatorio estuvo a punto de destruirse, pero Serrano-Arnal consideró oportuno protegerlas bajo custodia judicial cuando el archivo que acordó en 2020 adquirió firmeza. De hecho, las custodia en una pieza de convicción en los almacenes de los juzgados de Plaza de Castilla