El panorama económico sigue siendo una preocupación en los hogares: el 21% de los españoles reconoce que la economía de sus hijos será mejor que la suya, aunque resulta poco alentador para ellos ya que el 25% de los jóvenes no creen que su economía será mucho mejor que la de sus padres.
Estos resultados, publicados en el Informe Europeo de Pagos de Consumidores elaborado por Intrum Justitia, compañía especializada en gestión del crédito en Europa, refleja la realidad económica y la percepción del consumidor. En este sentido, el 57% de los preguntados sostiene que tendrá que apoyar económicamente a sus hijos una vez que estos se hayan independizado. La alarma es incluso superior para el 48% de los españoles mantiene que sus hijos no serán capaces de emanciparse tan pronto como les gustaría debido a motivos financieros. Por otro lado, 1 de cada 3 encuestados (29%) reconoce que en alguna ocasión se ha visto obligado a volver al hogar familiar debido a su situación económica.
Estos datos van en línea con la última edición del Observatorio de la Emancipación, elaborado por el Consejo de la Juventud, que afirma que la cifra de jóvenes que han logrado independizarse en el último año es la más baja desde 2004 al no alcanzar el 20% (19,7%). Pero, ¿como es posible que los padres pueda sostener ambas economías, la de sus hijos y las suyas? Esto empeora aún más cuando el 31% de los españoles no podría hacer frente a un gasto imprevisto de 850€ sin pedir dinero prestado.
Alimentación y droguería en alza
A pesar de estas desoladoras cifras, la tendencia del consumidor ha cambiado a lo largo de los años y ha incrementado su confianza, especialmente en gastos diarios que no suponen una gran inversión en el hogar. En estudio realizado el pasado enero por Kantar, señalaba que el consumo de alimentación (54,6%) y los productos de droguería (40%) y belleza (29%) seguía siendo los protagonistas en los gastos prioritarios.
Administrar correctamente el dinero se ha convertido en una asignatura obligatoria para los padres, el 89% reconoce que educan a sus hijos en un ambiente de responsabilidad respecto a los gastos y tener un "colchón económico" en vista a posibles imprevistos. En este sentido, para el 60% de los consumidores los centros escolares tienen una gran responsabilidad a la hora de educar a los más jóvenes sobre la economía de los hogares, mientras que el 77% afirma que se trata de una materia que debería aprenderse en este entorno.
Juan Carlos González, director general de Intrum Justitia, a destaca la necesidad de transmitir una correcta cultura del ahorro en el seno familiar para favorecer el flujo de crédito en los mercados. “Para evitar situaciones precarias es importante la educación en administración económica desde edades tempranas tanto dentro como fuera del hogar, con el objetivo de afianzar hábitos económicamente saludables en el día a día de los hogares españoles que les ayuden a manejar sus finanzas de forma efectiva”.
