'Pedro Sánchez sigue llorándole a Jordi Évole en el bar horas después de la emisión de Salvados', 'Una cola del INEM invade territorio francés' y 'Julio Iglesias reclama la paternidad de todos los españoles nacidos entre 1968 y 2016' son solo tres de los disparatados titulares de El Mundo Today, el diario satírico online al que se asoman millones de españoles cada mañana antes de enfrentarse a las noticias reales. Fue creado por Xavi Puig y Kike García en enero de 2009 como una web para impulsar un proyecto de mayor envergadura -un programa para televisión-, pero adquirió tanto éxito que a día de hoy se ha expandido en forma de colaboraciones en prensa escrita, en la radio, el teatro y en la televisión. Sin embargo, pese a ser el medio satírico que más ha penetrado en las redes sociales de los jóvenes de la Generación Millenial, existen otros más antiguos que resisten, incluso, en formato papel.
"El Roto, Forges, Sir Cámara... Algunos humoristas gráficos de los que trabajaron en semanarios de los últimos años del franquismo y el comienzo de la Transición continúan en activo, pero como medios dedicados a la sátira El Jueves es el más antiguo; Mongolia es la más atrevida y la más difícil de entender, como le pasó en su momento a Hermano Lobo y el digital El Mundo Today es al que más siguen los jóvenes", dice Luis Conde, teórico de la historieta y del humor gráfico en España. "Ellos se agarran a la mentira directamente y así no tienen problemas, pero aún así, alguno que otro han tenido…", considera el también periodista cultural, que comenzó su carrera como escribiendo sobre tebeos en Trinca, Bang!. Para muestra un botón. A cinco días de las elecciones generales del 26J la redacción de El Mundo Today recibía un burofax del PP advirtiéndole de que iniciaría "acciones legales" si no retiraba una web que había creado en torno a la figura del entonces candidato Mariano Rajoy. Pero la amenaza topó con el rechazo de cientos de internautas que no dudaron en difundir el contenido acompañado de mofas contra el partido, una reacción que derivó en el llamado 'efecto Streisand': el portal de Rajoy que querían fulminar se volvió aún más conocido. "Algunos intentan rescatar ese sentido del humor que se ha perdido, ya no sabemos ni lo que es humor ni lo que es política ni lo que es negocio", apunta.
Para Conde, la prensa satírica es de las "más serias y más auténticas". "Creo que son mucho más valientes y honestos que la mayoría de los periódicos que se dicen serios. Se atreven a decir lo que los demás no dicen, aunque lo disimulen con nombres distintos porque muchas veces no se puede asumir lo que hay que decir y si se dice con humor, parece que cuela", opina el tarraconense. Según Conde, la prensa satírica es una interpretación de la vida con respecto al ambiente donde se mueve y uno debe poder decir lo que piensa, siente y cree en cada momento. "La libertad no debe tener límites, uno debe saber hasta donde llega. Es mejor decir lo que se piensa que callárselo y dar paso a la autocensura. Si te equivocas, hay que saber rectificar", comenta. Además de las noticias que parodian la actualidad informativa en España, existen otros países con publicaciones referentes en este campo en el que el humor es trinchera. ¿Cuáles son los otros 'Mundos Today' que hacen reír a chilenos, franceses, ingleses o argentinos en tiempos de guerra?
The Clinic
Este semanario chileno se mantiene "firme junto al pueblo" desde 1993. Copió su eslogan del desaparecido diario Clarín, cerrado tras el golpe de Estado de 1973. Se caracteriza por mezclar sátira, humor político y crítica social. Es tan popular que ha dado origen a un bar en pleno centro de Santiago de Chile, en el barrio alternativo de Bellas Artes, un local que ofrece platos típicos del país con nombres relacionados a la política y farándula chilena. Se llama The Clinic en honor a la clínica The London Clinic donde permaneció inicialmente Augusto Pinochet en su arresto en Londres entre 1998 y 2000. Una de sus secciones más famosas es 'Piñericosas', donde la redacción se dedicaba a aglutinar los traspiés más comentados del expresidente chileno Sebastián Piñera.
Le Canard enchaîné
Los kioskos franceses reciben Le Canard enchaîné cada miércoles, uno de los periódicos más antiguos del país. Fundado en 1915 por Maurice y Jeanne Maréchal, combina reportajes de investigación sobre el panorama político y empresarial galo con historietas, caricaturas y noticias humorísticas breves. Su nombre se traduce como El pato encadenado y hace referencia al periódico L'homme libre, que fue forzado a cerrar por la censura gubernamental, pues en la jerga francesa canard también quiere decir "periódico". Una de sus recientes gestas fue la de hacerse con el contrato del peluquero personal del Presidente de la República, François Hollande, que cobraba cerca de 8.000 al mes, eso sí, con disponibilidad las 24 horas del día. El escándalo fue destapado en plena batalla por la reforma laboral, con las calles de Francia repletas de manifestantes.
Revista Barcelona
Subtitulada Una solución europea a los problemas de los argentinos, es una revista quincenal argentina que se lanzó en 2003 y que parodia la actualidad con noticias falsas cargadas de acidez. Barcelona reparte a diestra y siniestra. De corte progresista, no se han librado de sus dardos ni el kirchnerismo ni la oposición. Una de las mayores polémicas en las que se vio envuelta fue en 2014 cuando tildó al Papa Francisco de "putazo" por abrir el debate de una posible inclusión de los homosexuales en la Iglesia católica. "Influida por Francisco, la Iglesia Católica se abre por primera vez a 'sodomitas, invertidos y demás enfermos de homosexualismo'", señalaba la portada de la publicación, mostrando al Sumo Pontífice maquillado y con los labios pintados.
Private Eye
Con 55 años a sus espaldas el británico de Private Eye (Detective privado) es uno de los periódicos satíricos con el aguijón más envenenado de Reino Unido. Desde una pequeña oficina en el barrio londinense de Soho, un reducido grupo de excéntricos se encarga de elaborar quincenalmente esta publicación, orgullosa de contar con una cifra récord en demandas por difamación.
Il Vernacoliere