Inmersos en el mes de septiembre y en la vuelta a la rutina, son muchos los que aprovechan estos días para retomar buenos hábitos como el deporte y la alimentación saludable. Tras las vacaciones, en las que todos nos hemos permitido numerosas licencias, toca recuperarse de los excesos y, para muchos, despedirse de los kilitos conseguidos. Para ello, la famosa dieta del melón, que promete ayudarnos a adelgazar hasta tres kilos en tres días, se ha convertido en una de las opciones más populares.
Aunque considerado uno de los planes para perder peso más efectivos, hay que tener en cuenta que la dieta del melón (al igual que otras conocidas como la dieta del yogur o la dieta del atún) es muy restrictiva, por lo que no se aconseja llevarla a cabo durante más días de lo establecido ya que puede suponer un riesgo para la salud.
Las propiedades del melón
Rico en potasio, vitaminas A y C y folatos, entre otras propiedades, el melón es una de las frutas más deseadas durante los meses de verano, aunque, gracias a sus diferentes variedades la podemos consumir a lo largo de todo el año.
Como es de imaginar, la dieta del melón se basa en el consumo de esta fruta, admirada por su bajo valor calórico (apenas aporta 34 calorías por cada 100 gramos) y por su alto contenido en agua (más del 90 por ciento de su composición es agua). Además, tal y como apunta la Fundación Española de la Nutrición (FEN), cuenta tan solo con un seis por ciento de azúcar, una cantidad bastante inferior a la de otras frutas
Además de ser diurético y depurativo, el melón es ligeramente laxante, por lo que también es un gran aliado para combatir el estreñimiento.
¿Cómo se hace la dieta del melón?
Tal y como apuntan los expertos, antes de comenzar un plan tan restrictivo como la dieta del melón es aconsejable consultar con un especialista que asegure el buen estado de nuestra salud.
Aunque puede resultar algo monótona, la dieta del melón se ha convertido en una de las más populares ya que ayuda a adelgazar rápidamente. Eso sí, una de las claves para poder llevar a cabo este plan es hacer cinco comidas al día, sin saltarse ninguna ya que, aunque el melón tiene un gran poder saciante, al ser en gran parte agua pronto volveremos a tener hambre.
La dieta del melón establece que tanto para el desayuno como la merienda debemos tomar una infusión sin azúcar y la cantidad que queramos de esta fruta. A media mañana, podemos consumir un yogur desnatado, mientras que en la comida se debe comer únicamente melón.
En la cena, este plan permite introducir una pequeña cantidad de proteínas (100 gramos de carne, pollo y pescado), una porción de verdura y como postre, de nuevo melón.
Al ser una dieta muy estricta y restrictiva, no es de extrañar que haya quien encuentre difícil e incluso desanimante llevarla a cabo. Por ello existen algunas variantes, por ejemplo la que permiten consumir una porción de proteínas y verdura también durante las comidas.
Como es de imaginar, con un plan así de restrictivo se consigue adelgazar rápidamente. Tan rápido como, según aseguran los expertos, es probable que se recuperen los kilos perdidos. Para tratar de evitarlo, se aconseja que una vez pasados los tres días de dieta, se mantenga una dieta equilibrada, evitando los excesos y los atracones.
Además, es importante beber mucha agua y moderar la práctica de deporte, evitando aquellos que supongan un gran desgaste. Y es que la dieta del melón limita mucho el aporte calórico, evitando grupos nutricionales importantes, que puede afectar a la salud.
