Bienestar

¿Por qué la gente está echando sal en el retrete por las noches?

Te contamos todos los secretos sobre este sencillo truco que se puede llevar a cabo en casa

¿Por qué es bueno echar sal al retrete por las noches antes de ir a dormir? El curioso motivo que lo explica
Un bote de sal Freepik

¿Poner sal en el retrete antes de irnos a dormir? Puede que no hayas escuchado nunca hablar de este truco, pero es muy eficaz en el mundo de la limpieza. Cada vez estamos más ocupados. El trabajo, el cuidado de la familia, las actividades fuera de casa, las quedadas con amigos... Son muchos los planes que salen a diario para desconectar y salir un poco de la rutina. Esto hace que las tareas de limpieza del hogar a veces puedan parecer más abrumadoras de lo que son. No obstante, mantener la casa completamente limpia y ordenada es fundamental para tener una vida que sea saludable a la vez que cómoda.

Una de las estancias que siempre tiene que estar en perfecto estado es el aseo. Es una de las zonas que debe tener un ambiente saludable. Este área tiene que estar limpia y desinfectada para ayudar a prevenir todo tipo de enfermedades, además de para contribuir a tener una mejor calidad de vida. El problema viene cuando a veces resulta complicado limpiar de manera adecuada esta zona para dejarla libre de bacterias o gérmenes.

Lo cierto es que hay un truco perfecto para dejar actuar a lo largo de la noche. Y ese remedio es casero: tan solo se necesita tener sal en casa.

La limpieza del retrete con sal

La limpieza del retrete es una de las tareas más importantes del hogar y la sal puede ser el mejor aliado. Este producto es muy común y se encuentra en prácticamente todos las casas de los españoles. Sin embargo, lo que muchos no saben es que puede ser clave para mantener la limpieza del inodoro y que esté libre de bacterias.

¿Cómo se consigue? Lo primero de todo es que se tiene que combinar con bicarbonato de socio. La sal crea una mezcla perfecta para eliminar los gérmenes del retrete. La preparación es muy sencilla a la vez que económica. Para ello, solo se necesita mezclar unos 250 gramos de sal y bicarbonato de sodio en un bol. Después, se tendrá que verter en la taza del retrete antes de ir a la cama. La mezcla actuará durante toda la noche y se disolverá eliminando todas las bacterias.

Por la mañana se tendrá que frotar la cerámica con la escobilla retirando los residuos que hayan quedado de esta solución con un poco de agua caliente. A través de este método se podrá ver una buena diferencia en la limpieza que no se tiene con otros productos. Todo ello teniendo en cuenta que es más barato que comprar productos específicos o soluciones que son mucho peor para el medio ambiente.

De hecho, los expertos suelen recomendar que se tiene que dedicar ciertos momentos de la semana para limpiar el inodoro de una manera segura y efectiva. La falta de higiene en esta zona puede llegar a ser un riesgo para la salud de las personas.

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