Sexo y comida son dos placeres humanos que al mezclarlos puede dar lugar a un extra de excitación en las relaciones sexuales. A ese tipo de excitación con la comida se le conoce como sitofilia o 'food play'. Para disfrutar la sitofilia plenamente es además necesario tener en cuenta una serie de precauciones para evitar sustos innecesarios.
No se debe confundir la sitofilia con los alimentos afrodisíacos que, como explica Arola Poch, sexóloga de la red social Wyylde, no existen. “A la canela, las ostras, las fresas o el chocolate se les atribuyen poderes mágicos y afrodisíacos para aumentar la libido y mejorar el rendimiento sexual, pero la evidencia científica es apenas inexistente”. Algunos alimentos contienen feniletilamina y anandamida, que estimulan la generación de dopamina y endorfinas, hormonas de la felicidad, el placer y presentes en el deseo sexual y luego en el sexo.
O bien zinc o vitamina C, que estimulan el riego sanguíneo. Pero la cantidad de estas sustancias es tan escasa que el efecto es inexistente. “Otra cuestión es la sugestión que cada cual pueda hacerse al ingerir determinados alimentos y en determinados momentos. Y es que el efecto placebo sí está demostrado”, asegura Arola Poch.
Precauciones al mezclar comida y sexo
Si los alimentos tocan en general el cuerpo en zonas no íntimas, en principio no supone un gran riesgo, más allá de reacciones alérgicas que se puedan tener a determinados componentes y cuestiones de lógica como evitar el contacto con los ojos. “Si se juega con alimentos en la zona genital, entonces sí que conviene tener mayor precaución, ya que son zonas sensibles que se pueden irritar con facilidad”, aconseja Poch.
“No es recomendable introducir ningún tipo de alimento o bebida (fresas, chocolate, miel…) por la vagina o el ano, ya que pueden favorecer la aparición de infecciones”, añade la experta. De la misma manera, se desaconseja la introducción de hielo (o polos de helado), ya que este se puede pegar en las paredes de la vagina y causar lesiones.
“También es mejor no usar alimentos con forma fálica. Si se necesita un extra de deslizamiento, no es para nada recomendable optar por lubricantes caseros tipo mantequillas o aceites. No van a hacer la función esperada y el riesgo de infección es elevado. Además de que hay probabilidad de que dañen el preservativo. Se recomienda usar siempre un lubricante apto para uso genital”, recomienda.
Seis juegos para practicar sitofilia
Los expertos de Wyylde nos dan los siguientes consejos para hacer del sexo y la comida algo sensual y divertido:
1. Olvidarse de los platos. Colocar diferentes tipos de alimentos o bebidas sobre el cuerpo de la otra persona para, después, retirarlos con la boca o la lengua.
2. Nyotaimori y nantaimori. Relacionado con la práctica anterior, se trata de comer sushi o sashimi servido directamente del cuerpo desnudo de otra persona, de una mujer en el caso de nyotaimori y de un hombre, en el nantaimori.
3. El observador. Hay personas que son capaces de sacarle mucho partido sensual al acto de comer cualquier alimento y si este tiene forma sugerente, mejor. Comer un helado o un plátano, por ejemplo, puede ser un estímulo visual muy potente por la asociación de ideas que se puede llegar a hacer y por el papel protagonista que tienen boca, labios y lengua, zonas muy implicadas en el sexo.
4. Dar de comer. Dar de comer o ver como comen otros puede también resultar excitante en el contexto adecuado. Esta práctica se conoce también como feederismo.
5. 'Sploshing' o embadurnar el cuerpo con alimentos. Para este juego vale casi cualquier tipo de alimentos (dulces, salados, platos cocinados como espaguetis o natillas) que se pueden aplastar contra el cuerpo estimulando los sentidos del tacto, el gusto y el olfato. También se le conoce como WAM, acrónimo de 'wet and messy fetishism', fetichismo húmedo y desordenado, que da una imagen bastante gráfica de la cuestión.
6. Hielo. Jugar con determinados alimentos en la zona genital de la pareja que potencien la sensación de frío puede resultar un extra de placer. El hielo será aquí el mejor aliado a la hora de tener sexo, aunque también podemos usar un alimento o juguete sexual que haya estado dentro del congelador durante un rato (existen en el mercado juguetes de cristal para jugar con las temperaturas).
Al contacto con el hielo, nuestro cuerpo reduce el riego sanguíneo, pero, una vez retirado, hace justo lo contrario, aumentarlo, lo que puede hacer que sintamos mucho más placer en las zonas en las que se ha aplicado.
Alimentos que suben la libido
Como hemos explicado, los alimentos afrodisíacos no existen como tal, pero sí que hay algunos alimentos que pueden hacer que tradicionalmente se han considerado perfectos para tener una cita divertida, gustosa y quizá termine en sexo:
-Ostras. Contienen un alto contenido en zinc y además aportan Omega 3, un ácido graso que favorece el aumento del deseo sexual.
-Chocolate negro. Contiene feniletilamina, que ayuda a mejorar el estado de ánimo y aumentar la liberación de endorfinas, creando sensaciones de placer.
-Canela. Es una especia que ayuda a bajar los niveles de azúcar en sangre, lo que contribuye a mejorar el flujo en zonas genitales, algo positivo para el sexo.
-Mango. Su alto contenido en vitamina E y betacaroteno mejora la salud de los espermatozoides y los protege ante daños. También contiene triptófano, que ayuda a generar serotonina, la hormona de la felicidad.
-Aguacate. Además de ser un alimento sano y nutritivo, contiene vitamina E, potasio y grasas saludables que pueden contribuir a la salud sexual.
-Almendras. Las almendras tienen un alto poder afrodisíaco, especialmente en las mujeres. Y es que este fruto seco contiene arginina, un derivado proteico que mejora la circulación pélvica.
-Miel. La miel contiene boro, una sustancia que, según algunos estudios, tiene un impacto beneficioso en la producción de estrógeno, testosterona y vitamina D.
-Fresas. Son ricas en vitamina C, lo que puede mejorar la circulación sanguínea y además ayuda a reducir los momentos en los que el estrés se apodera de nosotros.