En las últimas horas se ha hecho muy popular la excelente infografía interactiva de National Geographic bajo el título de "What the world eats" (Lo que el mundo come), una herramienta muy completa que permite comparar el consumo de diferentes grupos de alimentos por países e incluso observar su evolución temporal.
Ahora bien, ¿qué significan todos estos datos y qué información útil podemos extraer? Para analizarlo en condiciones nos hemos puesto en contacto con Aitor Sánchez García, dietista y nutricionista autor del blog "Mi dieta cojea". Para entender bien lo que estamos viendo debemos partir de un hecho, conocer los grupos de alimentos que se consumen es una información demasiado amplia para saber los efectos de este consumo sobre la salud, pues no es tan importante rellenar categorías de alimentos en nuestra dieta como la calidad de cada cosa que comemos. "El ser humano se puede alimentar de mil maneras diferentes, y muchas de ellas pueden ser saludables", asegura. "Por eso nos hemos adaptado a tantos medios y contextos".
Para Aitor Sánchez, la infografía permite sacar sobre todo conclusiones e información de comercio, de tendencias de consumo, pero a nivel de salud no debería servir para sacar conclusiones precipitadas. "Un gajo que ponga "cerdo" o "cereales" no me da mucha información si no sé si es carne magra o derivados cárnicos como embutidos", asegura. "Lo mismo sucede con los cereales ¿son integrales? ¿Bajo qué preparación? No es igual de sano un arroz con garbanzos o verduras, que un arroz con magro. Tampoco es lo mismo un calabacín que una patata". En general, apunta, podemos decir que la infografía es "inespecífica para sacar conclusiones a nivel de salud, pero muy interesante a nivel cultural".
Una vez dicho esto hay algunos datos curiosos que sí podemos extraer y analizar. Si acudimos a la evolución de alimentación en España, Sánchez destaca varios datos:
1. Que ha bajado el consumo de cereales en los últimos años. "Esto no es alarmante", explica, "el problema es que se ha mantenido un predominio de los cereales refinados, y no los integrales, que son el tipo que deberían estar presente".
2. Que ha bajado el consumo de frutas y verduras en España, y esto es "lo más preocupante".
3. Que seguimos teniendo un buen consumo de pescado, de los mayores del mundo junto a Japón.
4. Que hemos tenido un ascenso constante en el consumo de carne, que ligeramente se ha reducido en el último lustro.
Comparativa con otros países
Comparando con los países de nuestro entorno, Alemania muestra una transición alimentaria más suave que la nuestra, según Aitor, aunque destaca el aumento en las calorías totales, que se debe sobre todo a azúcares simples. Un caso muy parecido al de Reino Unido, explica, aunque no ha aumentado tanto el azúcar.
Comparando a nivel transversal, somos de los que más Grasas+Azúcar tienen, afortunadamente casi todo nuestro sector es porque proviene del Aceite Vegetal, en este caso de oliva (de ahí que algunas categorías de alimentos tengan poco sentido). Curiosamente, destaca el nutricionista, si cogemos el panorama global, vemos que España tiene un consumo más alto que el resto de Europa en vegetales, pescado y aceite vegetal, mientras que somos de los que comemos menos carne y azúcar. "Y sin embargo estamos más gordos", plantea.
¿A qué se debe esta pequeña paradoja? "Aquí influyen otras variables", puntualiza. "Políticas de promoción de la actividad física, rutina diaria, u otros grupos de alimentos como los cereales refinados. Sin duda no podemos culpabilizar del sobrepeso-obesidad a la dieta individual, sino del ambiente obesogénico que se ha creado en su país".
Enlace: "What de world eats" (National Geographic)
* Para saber más de alimentación, recomendamos la charla de Aitor Sánchez en Naukas Bilbao 2014: “Si Guardiola fuera nutricionista”