Los periodistas que recorren el mundo siguiendo el Mundial de Fórmula 1 de circuito en circuito coinciden en los madrugadores (hora europea) mensajes que publican desde Shanghái en las redes sociales: Fernando Alonso es "optimista" y espera subirse de nuevo al coche este fin de semana en el GP de China.
El piloto español ha sido examinado este jueves durante poco más de una hora por los médicos de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), que deberán decidir si puede correr o, como sucedió en Bahréin, tendrá que ver de nuevo los coches desde el muro de McLaren.
Alonso sufrió en Australia un escalofriante accidente que le provocó la fractura de la novena costilla y un neumotorax. Este ya está curado, pero a la costilla le falta aún un poco para acabar de soldarse.
Aunque la opinión mayoritaria se inclina por asegurar la presencia del asturiano en la parrilla, lo sucedido en Bahréin lleva a muchos a la prudencia a la espera del comunicado oficial de la FIA.
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