Cada día que pasa sin que McLaren anuncie el fichaje de Fernando Alonso -y el nombre de su compañero de equipo en 2015-, en Italia escuece más su salida de Ferrari. Sólo así se explica que cada día surja una voz o un artículo en creciente tono ofensivo hacia el piloto español.
El último, este martes en la edición impresa de La Gazzetta dello Sport. El diario deportivo italiano comienza dando una noticia que, cierta o no, sentará regular en el entorno de McLaren. Así, publica que durante la negociación del contrato el español ha impuesto al equipo británico una sorprendente cláusula que "le daría la posibilidad de liberarse antes de tiempo si la competitividad del McLaren y la nueva unidad de potencia Honda no fueran suficiente".
Según La Gazzetta, el contrato que será oficial, se supone, dentro de unos días, tiene una duración de dos años apmpliable a tres, pero si el bólido fuese tan desastroso como los que Ferrari le ha dado durante cinco años -esto no lo dice el periódico milanés-, y en Mercedes quedase libre un volante, Alonso podría irse sin más al equipo alemán.
Por si no quedase suficientemente claro este presunto as en la manga que se guarda el asturiano, el artículo intenta menospreciar de antemano a ese motor Honda en el que tantas esperanzas tienen puestas McLaren y Alonso: “Las prestaciones de Honda en los tests posteriores al GP de Abu Dabi fueron pésimas: cinco vueltas en dos días con dos paradas en la pista, lo que significa que la marca japonesa tendrá que hacer un milagro para llegar a los entrenamientos de pretemporada de Jerez en febrero con una unidad fiable y potente”.
Una vez tejido el hilo argumental, La Gazzetta suelta la bomba. Basándose en esa presunta cláusula de rescisión libre "impuesta" por Alonso, se puede leer: “En previsión de conflictos como los que llevaron a la brusca separación de 2007 (su anterior etapa en McLaren), algunas webs inglesas insinúan y se hace la siguiente pregunta sobre Alonso: ¿Es el veneno de los equipos?”.
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