Del mismo modo que Fernando Llorente abandonará el Athletic el 30 de junio para jugar en la Juve, Fernando Amorebieta lo hará, pero en su caso para hacerlo en la Premier, y más concretamente en el Fulham. Ambos futbolistas rechazaron las ofertas de renovación que les hizo Josu Urrutia y se irán el club bilbaíno después de un año sin apenas aportar nada al equipo, con la carta de libertad y sin dejar un euro.
Lo más significativo es que mientras el Athletic ofreció a Amorebieta renovar cinco años, a razón de 1,8 millones por temporada, el central ha llegado a un acuerdo con el Fulham por cuatro años y una ficha sensiblemente inferior. Después de rechazar una oferta del fútbol ruso y figurar en la agenda de otro importante club inglés como el Everton, Amorebieta verá cumplido su deseo de abandonar el Athletic y jugar en la Premier, además de vivir en una ciudad como Londres.
Tal y como hizo la Juventus en el caso de Llorente, es posible que el Fulham comunique al Athletic que ha iniciado negociaciones para fichar al todavía jugador rojiblanco, aunque esto no deja de ser un puro formalismo. Aún más en el caso de un jugador con el que Marcelo Bielsa hace tiempo que dejó de contar, después de acusarle de estar pensando en su marcha y no rendir al nivel que debía.
Amorebieta se despedirá de San Mamés para jugar en un campo aún más antiguo como es Craven Cottage, donde el Fulham juega como local desde 1896. Dirigido por el holandés Martin Jol, el Fulham es el equipo más antiguo de Londres, lleva doce años ininterrumpidamente en la Premier y es el rival directo del Chelsea, donde militan varios jugadores españoles como Azpilicueta, Oriol Romeu, Mata y Fernando Torres. Todos ellos serán la temporada que viene vecinos de Amorebieta.
Amorebieta rompió con su agente, Gorka Arrinda, que había negociado con el Athletic su oferta de renovación. El internacional por Venezuela se puso en manos de una agencia de representación inglesa para que le buscara equipo, prioritariamente en la Premier, y finalmente su destino será el Fulham.
Si el caso de Llorente ha sido dañino para el club bilbaíno, lo peor es que su presidente ha logrado que haya futbolistas como Amorebieta que no quieran jugar en el Athletic ni siquiera por dinero.
