Hace apenas unos días se supo que el fiscal del juicio en el que está imputado José Luis Pérez Caminero solicita una pena de cuatro años de prisión y una multa de cuatro millones de euros para el actual director deportivo del Atlético de Madrid por su presunta integración en una trama dedicada al blanqueo de capital procedente del narcotráfico. A los dirigentes rojiblancos no parece importarles en absoluto.
De hecho, según publica este lunes el diario Marca, en el Atlético "ya se maneja la opción de renovar a José Luis Pérez Caminero, director deportivo del club". Caminero fue contratado en 2011, cuando ya se conocía su imputación en ese presunto delito. Su contrato expira en junio de 2014 y el club madrileño quiere atar a un director deportivo con el que le ha ido muy bien.
Si se confirma la renovación, el Atlético se expone al riesgo de una sentencia adversa que dé con los huesos de Caminero en la cárcel o, como mal menor, que no tenga que ir a prisión pero sea declarado culpable. ¿Qué jutificación daría entonces sobre una decisión que podría posponer hasta conocer el veredicto judicial?