Navidad es uno de los mejores momentos del año para lanzarse a coger un avión, recorrer kilómetros y descubrir sitios nuevos a través de su historia, su cultura y su gastronomía. La Navidad es un momento de celebración, pero también un periodo ideal para descubrir cómo estas fiestas se viven en otros lugares del mundo.
Para todos aquellos que quieran aprovechar para viajar hasta la otra punta del mundo estas vacaciones, aquí un pequeño listado de algunos destinos que van a hacer de estas festividades algo inolvidable.
Cuatro destinos a los que viajar en Navidad
Chicago
Es considerada una de las grandes ciudades, y de las más interesantes, para conocer de los Estados Unidos. Llamada la “ciudad del viento” y convertida en la ciudad más grande del Medio Oeste, Chicago ofrece numerosos atractivos para visitarla en Navidad: desde las atracciones del Winter WonderFest y el patinaje sobre hielo en el parque Maggie Daley, hasta un paseo por la avenida de las compras de lujo, la famosa Magnificent Mile, iluminada con más de un millón de luces. Además, cuenta con el Christkindlmarket, uno de los principales y más antiguos mercados navideños del país donde se pueden comer pretzels, bratwurst y vino caliente.
Malta
No hay que irse muy lejos para disfrutar una Navidad fuera de casa. El ejemplo está en Malta, un archipiélago donde la navidad se convierte en una festividad realmente especial para los isleños cuando La Valletta se llena de color gracias a las luces, las guirnaldas y los árboles de navidad que lo inundan todo.
Como curiosidad hay que mencionar que la noche del 24 de diciembre, la tradicional Misa del Gallo tiene de peculiar que su sermón es dictado por niños de 7 a 10 años y que a lo largo de todas las iglesias que se distribuyen por la isla, se encuentran diferentes belenes artesanales que se realizan en la zona y que constituyen una ruta turística en sí misma.
Budapest
Uno de los destinos ideales para vivir la Navidad fuera de casa es la capital de Hungría. Sus mercados navideños, sus pistas de patinaje – ya que Budapest cuenta con pistas iluminadas por toda la ciudad, como Városliget, la más famosa, a los pies del gran castillo barroco de Vajdahunyad-, los balnearios termales como el de Rudas, el Széchenyi o el de Gellért y, por supuesto, la nieve, hacen de este destino en estas fechas algo muy especial.
Eso sí, hay que ir bien abrigado y con ganas de andarse toda la ciudad, pues es perfecta para organizar caminatas y visitarla al completo a pie. ¡Ah!, si se viaja hasta allí, no hay que dejar de probar en sus famosos puestos, sus deliciosos strudel acompañados de su conocido vino caliente.
Aspen
Todos aquellos amantes del esquí y el patinaje sobre hielo encontraran en Aspen el lugar perfecto en el que pasar la Navidad fuera de casa y realizar deportes de invierno en uno de los mejores lugares del mundo: en plenas Montañas Rocosas. Cada año, la ciudad celebra los 12 días de Aspen, una festividad en la que los villancicos victorianos, el patinaje, el encendido de las luces y el tradicional cacao caliente con galletas, lo inundan todo. Y si estos no son suficientes motivos como para lanzarse a coger un vuelo y viajar hasta allí, lo serán sus famosos spas con vistas a las montañas, donde disfrutar de una tarde de auténtica desconexión en la que dedicarte tiempo a ti mismo.