El Gobierno prohíbe la entrada de viajeros extranjeros por tierra, mar y aire hasta finales de mayo y establece cuarentenas obligatorias de 14 días para todos los viajeros que lleguen a España mientras dure el estado de alarma. Dos noticias que han caído como un jarro de agua fría en el sector más golpeado por la crisis de la covid-19, el turismo. La patronal Exceltur -que engloba a las empresas turísticas más importantes del país tales como aerolíneas, hoteles o agencias de viajes- asegura estar "desconcertada" por unas decisiones "duras y que no estaban en absoluto en ninguno de los debates con el Gobierno en las últimas semanas".
El vicepresidente de Exceltur, José Luis Zoreda, califica de "sorprendente" que estas medidas lleguen 24 horas antes de la "gran reunión de la Unión Europea en la que se debatirán los procedimientos para los viajes transfronterizos". "¿Es una casualidad, una descoordinación o un preludio de los vientos que van a soplar mañana en Bruselas?", se pregunta. "Los atenuantes que colocará el Gobierno es que sólo durarán doce días, mientras dure el estado de alarma pero, ¿merecía la pena dar ese golpe al sector por doce días o es que es que está ya previsto alargar el estado de alarma más tiempo?", insiste.
Zoreda lamenta que "el turismo, de nuevo no está en la agenda de las decisiones estratégicas" y recuerda que durante los últimos días, los grandes turoperadores alemanes y británicos habían manifestado el claro interés de sus residentes en viajar a España este verano, unas conversaciones con los gobiernos regionales de Canarias y Baleares que "probablemente hoy se habrán truncado". Además, recuerda que esto también supone un "freno" para esos viajeros internacionales, que ante las "dificultades" y "trabas" que pone España podrían decidirse por otros destinos como Grecia, "con menos incertidumbre en las perspectivas de viajar".
En la orden ministerial publicada en el BOE este martes, Interior ya avanza que "teniendo en cuenta que, durante el proceso de 'desescalada', se aplica a los residentes en España la restricción de movimientos interprovinciales (...) se considera conveniente limitar también el acceso a tales demarcaciones desde otros Estados miembros por vías aérea y marítima". "No tiene sentido que una persona no pueda ir a su segunda residencia en Baleares y un extranjero sí pueda hacerlo vía aérea. Creemos que estos agravios comparativos hay que evitarlos", ha asegurado más tarde el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), Fernando Simón.
Los hoteles no abrirán
En el caso concreto de los hoteles, tienen permitida la apertura desde esta semana en todas las provincias que hayan accedido a la fase 1 del plan de 'desescalada' del Gobierno, pero la mayoría de ellos ha desechado la opción de hacerlo mientras se mantengan las restricciones a la movilidad interior -entre provincias- y exterior, así que esto no hace más que ratificar unos planes que ponen el horizonte de vuelta a la actividad ya en julio o, incluso, en julio; a medio camino de la temporada alta de verano.
Desde la cadena hotelera Barceló confiesan a este medio que no se planteaban abrir ningún hotel en mayo y esto continuará así mientras haya restricciones en los desplazamientos. "Por ahora no abrimos hoteles porque no es factible, no tiene sentido si la gente no puede viajar, así que la fecha es una incógnita. Las nuevas medidas no cambian las cosas. Nosotros abrimos hoteles, no hospitales", aseguran. La patronal Exceltur estima que el 'parón' en la actividad tendrá un impacto económico para las compañías turísticas en España de entre 92.500 millones y 124.000 millones de euros.
"Es catastrófico"
Las agencias de viajes también verán golpeado su negocio con las nuevas medidas del Gobierno. La Confederación Española de Agencias de Viajes (CEAV) asegura que "más de la mitad de los turistas que entran en el país lo hacen a través de intermediarios", contratando algunos servicios en las agencias españolas. Además, las agencias de viajes creen que "estas medidas suelen ser recíprocas entre los países y, por tanto, es una barrera prácticamente infranqueable".
Esta industria siente "muchísima preocupación" ante las nuevas restricciones pues "mantener la cuarentena y no abrir las fronteras es prácticamente lo mismo desde el punto de vista turístico y, en temporada alta, cada día que pasa es perjudicial" para la industria. El presidente de la patronal, Carlos Garrido, ha calificado la situación de "catastrófica", pues las nuevas restricciones del Gobierno a los turistas "complica y retrasa los plazos de vuelta a la actividad".
En opinión del representante de las agencias, "mientras no se abran por completo las fronteras y no se liberalice la opción de viajar, no se ofrecerá confianza a clientes y no se restablecerá el turismo". "Las agencias de viajes no han abierto ni tienen previsto hacerlo a corto plazo porque no tenemos producto que vender. ¿Quién va a ir a un sitio en el que tenga que estar en cuarentena? Va en contra de la naturaleza del propio viaje", sentencia Garrido.