Santander desvela los objetivos clave de su estrategia para los próximos tres años. El grupo ha anunciado que subirá el 'pay out' (porcentaje del beneficio destinado a dividendos) del 40% actual al 50%, en línea con el resto de competidores españoles, y se ha marcado un objetivo de rentabilidad sobre patrimonio tangible (Rote) de entre el 15% y el 17% para antes de 2025, desde el 13,4% con el que cerró 2022.
El porcentaje de 'pay out' tiene en cuenta tanto el dividendo en efectivo como la recompra de acciones. Santander se había quedado rezagado respecto a otros bancos españoles, que como en el caso de CaixaBank se ha fijado distribuir como dividendo entre el 50% y el 60% de los resultados.
El equipo directivo de Santander ha explicado a los inversores en Londres hoy el plan de crecimiento para lograr estas metas estratégicas. También aspira a mejorar la ratio de eficiencia, que mide el nivel de gastos sobre ingresos y es mejor cuanto más baja, desde el 45,8% al 42%, con un aumento de los costes medio del 4-5% entre 2023 y 2025. En cuanto al capital, espera llevar la ratio de máxima calidad CET1 por encima del 12%.
En Europa, Santander alcanzará una rentabilidad Rote máxima del 15% en 2025, que se logrará compensar con la prevista para los negocios en Sudamérica (del 19%). No obstante, el grupo considera que sus unidades en el Viejo Continente pasarán a aportar más del 40% del beneficio en tres años, frente al 33% de 2022. En América del Sur, en donde Brasil es el gran generador de resultados, la contribución se recortará del 31% a cerca del 25%.
"Nos marcamos nuevas ambiciones. Por primera vez en la historia del grupo esperamos tener un crecimiento de doble dígito de media al año en el valor contable tangible por acción y el dividendo por acción. La rentabilidad del grupo estará por encima del coste del capital", ha puesto en valor Ana Botín, presidenta de Santander, ante los inversores de la City.
Crecimiento en clientes
Otro de los objetivos que desvelará la cúpula de Santander en Londres es el plan para captar 40 millones de clientes en todo el mundo en los próximos tres años, para conseguir una base de clientes de 200 millones. Con este salto, el grupo espera elevar los ingresos alrededor de un 7-8% al año de medio sin tener en cuenta la variación en los cambios de moneda en los distintos mercados en los que opera.
"Nuestra posición de liderazgo en mercados locales y las capacidades comerciales de nuestros negocios y red globales nos permitirán reforzar los resultados, lo que generará más valor para nuestros clientes, accionistas y la sociedad", ha expuesto Héctor Grisi, consejero delegado de Santander, en su primer Investor Day.
El grupo se apoyará para lograr sus metas financieras en su estructura basada en negocios globales, Santander Corporate & Investment Banking y Wealth Management & Insurance, y en las unidades de financiación de automóviles y PagoNxt, la plataforma de pagos del banco. Estas divisiones generaron más del 30% de los ingresos del grupo y del 50% del beneficio en 2022. Ahora, Santander prevé que la aportación a los ingresos al grupo de estos negocios aumente hasta más del 40% para el año 2025, mientras que en el caso de los ingresos por comisiones superará el 50%.
Dividendo de 2022
Santander ha anunciado además que el consejo someterá a votación en la próxima junta general de accionistas, prevista para el 31 de marzo, un dividendo final en efectivo por acción de 5,95 céntimos de euros por acción con cargo a los resultados de 2022. Con ello, el dividendo en efectivo total del ejercicio será de 11,78 céntimos de euro por acción, un 18% más que el año anterior, según la entidad.
Además, lanzará un nuevo programa de recompra de acciones por valor de 921 millones de euros, tras haber recibido la correspondiente aprobación regulatoria. Una vez completadas estas acciones, la remuneración total al accionista para 2022 habrá sido de 3.842 millones de euros (en torno al 40% del beneficio ordinario de 2022), repartidos entre dividendos en efectivo (1.942 millones de euros) y recompra de acciones (1.900 millones de euros).
Sueldos de Botín y Grisi
El grupo también ha hecho públicos los sueldos de la cúpula durante 2022. Ana Botín, presidenta de Santander, ganó 11,74 millones, entre los que se incluyen el pago variable de años anteriores. Supone una caída del 5% respecto a 2021 precisamente por no lograr determinados objetivos que componen el bonus. De todas formas, el grupo mejorará en un 3% la remuneración fija prevista de la presidenta para 2023, por debajo de la inflación.
Grisi, que tomó las riendas como consejero delegado en enero, percibirá la misma cantidad que su predecesor en el cargo, José Antonio Álvarez, algo más de siete millones entre salario fijo y bonus, a lo que habría que añadir un plan de pensiones. Y, como suele ser habitual entre los altos ejecutivos, el número dos recibió a finales de 2022 un pago de 2,5 millones para cubrir los gastos de su cambio de residencia.
"En la medida en que dicho pago resulta de la capitalización de la ayuda anual por un periodo de tiempo de cinco años de acuerdo con las prácticas y políticas corporativas, si terminase su relación antes de dicho periodo, reintegrará la parte proporciona", explica el grupo en su memoria anual.
