BBVA adquirió el pasado 15 de marzo, día en el que celebró su junta general de accionistas, 6,6 millones de acciones propias a un precio de 5,37 euros por acción. La entidad presidida por Carlos Torres vivió ese día su junta de accionistas más polémica en su historia, tras anunciar unas horas antes la renuncia de Francisco González a la presidencia de honor debido a las informaciones publicadas sobre el caso Villarejo.
Ese mismo día BBVA compró otros 2,2 millones de títulos del banco, a 5,43 euros, una inversión que se correspondió "a operativa de derivados, préstamos de valores y planes de incentivación para empleados", de acuerdo a información de los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores. Además vendió 1,2 millones de títulos ese mismo 15 de marzo a 5,27 euros por acción.
El valor en Bolsa de BBVA no se resintió el día que celebró su agitada junta de accionistas. De hecho, el valor de las acciones del banco en el mercado subieron desde los 5,28 euros del 14 de marzo hasta los 5,37 euros el 15 de marzo, y hasta los 5,42 euros el lunes 18 de marzo.
Más de 65 millones de acciones
BBVA ha llevado a cabo desde principios de año una agresiva política de compra y venta de acciones propias, coincidiendo con el estallido del caso Villarejo.
Entre el 14 de enero y el 22 de marzo, la entidad ha comprado 65,3 millones de acciones propias y ha vendido 65 millones, según la información consultada en CNMV. El banco precisa que parte de esas operaciones responden a derivados, préstamos y planes de incentivos para empleados.
