La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) teme que si la Comisión Europea impone sus tesis en el final del 'roaming' y no tiene en cuenta el factor estacional de la avalancha de turistas en España en meses estivales, las redes móviles de Baleares, Cataluña, Comunidad Valenciana y Andalucía correrían un "claro riesgo de no realizar (los operadores) las inversiones necesarias para dar servicio en los meses más turísticos", lo que provocaría "un empeoramiento de la calidad de los servicios para los usuarios en esas zonas" y, en caso extremo, podría provocar el colapso o caída de las redes.
Bruselas se niega a reconocer el hecho diferencial de los países más turísticos (España, Croacia y Grecia, principalmente), que cada verano reciben millones y millones de turistas extranjeros que hacen uso de los servicios de 'roaming' en voz y datos. Los operadores de esos países se ven obligados a realizar inversiones adicionales para dimensionar sus redes para los momentos de pico de tráfico de datos en julio y agosto, pero la Comisión no está dispuesta a reconocer esos sobrecostes porque los considera extrapolables a todo el año (considera que ese consumo es uniforme todo el año).
La Comisión dice que las redes deben estar dimensionadas para todo el año aunque en los países turísticos los picos de demanda de datos se disparan en julio y agosto
Bruselas quiere fijar unos precios mayoristas máximos iguales para todos los países para poner fin al 'roaming' el 15 de junio de 2017, pero el regulador español ha alertado en un duro informe de contestación al Ejecutivo comunitario que con esos precios máximos no se cubrirían los costes extraordinarios que tienen que asumir los operadores en España, país que recibirá este año más de 70 millones de turistas.
En este contexto, las compañías de móvil podrían recortar sus inversiones en redes porque los costes no se cubrirían con los precios mayoristas fijados desde Bruselas, con lo que su fiabilidad en los meses pico estaría en entredicho y habría "un empeoramiento de la calidad de los servicios en zonas turísticas". También podrían trasladar esos sobrecostes a los usuarios nacionales elevando sus tarifas, lo que distorsionaría el mercado.
Para evitar que esto ocurra, la CNMC se está batiendo el cobre con Bruselas para que dé marcha atrás en sus intenciones y haga una excepción con los países más turísticos. El regulador argumenta que, por ejemplo, los operadores móviles en Baleares, la comunidad autónoma con más recepción de turistas extranjeros, tienen que asumir "un 90% de coste adicional del servicio mayorista de itineraria en datos con respecto al mercado doméstico por el efecto de la estacionalidad".
Si los precios mayoristas no cubren los costes, los operadores podrían recortar sus inversiones para que las redes aguanten el aumento de tráfico previsto tras el fin del 'roaming' en 2017
Este porcentaje es del 66% en Cataluña, la segunda comunidad más turística, del 44% en la Comunidad Valenciana y del 40% en Andalucía. Para demostrar a la Comisión cómo afecta la estacionalidad a España, la CNMC contrapone el ejemplo contrario: Canarias, cuyo clima cálido atrae turistas extranjeros todo el año, tiene unos costes adicionales de estacionalidad de sólo el 18%, de forma que aquí las redes están dimensionadas para un tráfico casi uniforme durante todo el año.
Baleares, insiste el regulador que preside José María Marín Quemada, "por sí sola acogió el 21% del tráfico anual total de datos en itinerancia prestado en España en 2015, mientras que el tráfico doméstico fue de únicamente del 4%", lo que demuestra el impacto que tiene el turismo extranjero en esta comunidad.
El ejemplo más flagrante es Baleares, donde los operadores tienen que asumir "un coste adicional del 90% del servicio mayorista de datos por el efecto de la estacionalidad"
La CNMC recuerda que "el incremento esperado de tráfico (tras el fin del 'roaming', que ahora limita el uso de los datos cuando se viaja fuera del país de procedencia por los altos precios) va a requerir inversiones adicionales de los operadores en capacidad adicional y nuevas infraestructuras en las zonas turísticas que se prevén que sean de una cuantía importante a tenor de las previsiones de crecimiento de demanda, que suponen unas necesidades de equipamiento de red adicional".
Según las previsiones de la CNMC, los volúmenes de tráfico de datos en España a partir de junio de 2015, cuando desaparezca el 'roaming' se multiplicarán por seis con respecto a los meses anteriores. Con estos aumentos de tráfico, "que consideramos conservadores", afirma el regulador, los operadores tendrán que invertir fuerte para mantener los estándares de calidad y evitar colapso del servicio y caídas de red en momentos de picos de consumo.