La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) trabaja ya en la primera evaluación sobre el impacto de la reforma de las pensiones, que publicará este año y podría obligar al Gobierno a aplicar nuevos ajustes. Deberá verificar que se cumplen los objetivos de sostenibilidad, calculando el impacto medio anual de las medidas para fortalecer los ingresos y utilizando las proyecciones de gasto derivadas del último Informe de Envejecimiento de la Comisión Europea (Ageing Report), publicado el pasado mes de abril.
Lo que se ha denominado como "cláusula de cierre" encarga a la AIReF la tarea no sólo de estimar el impacto de las medidas adoptadas para fortalecer los ingresos, sino de "comprobar que tanto los ingresos como el gasto en pensiones (promedio 2022-2050) estimado por el Ageing Report estén bajo ciertos umbrales". En el caso de que se produjera un desequilibrio, en el plazo de un mes desde la recepción del "Informe de Evaluación" de la AIReF, el Gobierno solicitará al organismo independiente de control fiscal un "Informe de Impacto de las Medidas".
En su solicitud, el Gobierno identificará un conjunto amplio de posibles medidas para eliminar el exceso de gasto neto en pensiones estimado por la AIReF, tal y como reza la norma. Y a partir del Informe de Impacto de las Medidas de la AIReF, el Gobierno negociará con los interlocutores sociales el envío de una propuesta a la Comisión de Seguimiento y Evaluación de los acuerdos del Pacto de Toledo para corregir, de forma equilibrada, ese "exceso de gasto" en pensiones.
Lo hará, según marca el Real Decreto-ley, "mediante un aumento de las cotizaciones u otra fórmula alternativa de incrementar los ingresos o una reducción del gasto en pensiones en porcentaje del PIB o una combinación de ambas medidas". La reforma ya contempla subidas de cotizaciones a los trabajadores para afrontar el creciente gasto en pensiones que acarrea no sólo el envejecimiento de la población, sino también una de las medidas más importantes de la reforma: la revalorización anual con el IPC del año anterior.
El cóctel de la inflación y los 'baby boomers'
La entrada en vigor de esta medida coincidió con la crisis inflacionista más fuerte en décadas, lo que condujo a fuertes revalorizaciones de las pensiones desde 2022 (2,5% en aquel año, 8,5% en 2023, 3,8% en 2024 y 2,8% este 2025). El gasto anual ya ha rebasado la barrera de los 200.000 millones de euros en 2024. Y pese al aumento de cotizaciones que contempla la reforma (sólo este año está previsto un golpe de 5.800 millones a empresas y trabajadores) los números no salen y los expertos anticipan que serán necesarios nuevos ajustes.
El Gobierno tendrá que enviar un proyecto de ley al Parlamento que contenga las medidas apropiadas para eliminar el exceso de gasto neto en pensiones antes del 30 de septiembre, que entrará en vigor el 1 de enero del año siguiente. Si esto no ocurriera, y las medidas correctoras no entraran en vigor el 1 de enero de 2026, la ley marca que la cotización del Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), la nueva cotización que se aplica a las nóminas desde 2023, aumentará.
Ese aumento tendrá que compensar dos décimas partes del exceso estimado por la AIReF a partir de ese momento, y otras dos décimas partes en cada uno de los años siguientes hasta que se adopten nuevas medidas del mismo impacto o el exceso de gasto neto sea corregido. Además, la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal repetirá esta evaluación de 2025 cada tres años para garantizar que se cumplen dichos objetivos de sostenibilidad. Es decir, la siguiente revisión se realizará ya en 2028.
La 'bola de nieve' del gasto en pensiones cada vez se hará más grande. La Comisión Europea calcula que el gasto crecerá con más fuerza en los próximos años, a medida que la generación más numerosa (la del baby boom) se jubile. Se elevará al 14,3% del PIB en 2030, al 16,2% en 2040 y al 17,3% en 2050. En su último informe alertó de que las medidas de ingresos planteadas en la última reforma de pensiones, como el aumento de las contribuciones al sistema y de la edad efectiva de jubilación, no serán suficientes y el déficit del sistema alcanzará el 3,1% en 2053.
Las cotizaciones que abonan los trabajadores y los empresarios ya sólo pagan alrededor del 70% de la factura, siendo necesario cubrir el resto con lo que ingresa el Estado vía impuestos o con deuda pública. El Fondo de Reserva, conocido como 'hucha de las pensiones' y creado en 1997 para ahorrar capital y pagar las prestaciones en los momentos difíciles, ha estado años bajo mínimos. La reforma pretende recuperar fondos con la sobrecotización al MEI, pero el ahorro acumulado hasta ahora (e intocable hasta 2032) apenas daría para pagar la nómina de un mes.
Triyuga
01/01/2025 07:04
¿ Vais a trabajar hasta que las gallinas tengan dientes !!!
nfrancisco1962
01/01/2025 10:22
y la culpa será de los pensionistas que han estado trabajando duro una larga vida (Hasta el día de hoy el que escribe 42 años oficiales cotizados). Menos políticos, chiringuitos , duplicidades etc... Y habrá pensiones y dignidad para todos.