José Ignacio Goirigolzarri ha decidido 'sanear' los consejos de administración de las 649 sociedades participadas de Bankia con la salida de 801 representantes del banco cotizado. La decisión estaba tomada antes de admitirse la querella contra la anterior cúpula de Bankia, pero el proceso judicial acelerará este plan de adelgazamiento. De hecho, ayer se produjo la primera 'víctima': Juan Llopart. El ex de Bankia anunció su dimisión como consejero de Deóleo, una de las 16 sociedades cotizadas de la entidad nacionalizada.
La intención del nuevo equipo gestor de la entidad es desprenderse del 75% de los 1.069 consejeros con que cuenta Bankia en sus sociedades participadas, como parte de un plan de austeridad y profesionalización de los consejos de Administración en las sociedades del Grupo y participadas. "Tras la querella, se van a precipitar muchas salidas en sociedades de ex directivos ligados a Bankia porque las empresas no quieren tener sentados en sus sillones a gente que pueda llegar a estar imputado por la Audiencia Nacional", explican desde una empresa del Ibex.
Los 267 consejeros 'supervivientes' tendrán que estar sometidos a unas estrictas normas establecidas por el nuevo equipo de Goirigolzarri. Por una parte, aquellos que sean vocales de un consejo tienen que ser personal directivo, ejecutivo o con relación laboral con la entidad. Además, el número de consejeros se reducirá, en las empresas participadas por Bankia al 100%, a dos administradores solidarios o, alternativamente, en caso de entidades reguladas, al mínimo número posible de consejeros. En el caso de sociedades participadas al 100% por el grupo BFA-Bankia, no existirán dietas de Consejo. Por último, en el caso de que la participación no alcance el 100%, las dietas a las que, en su caso, tuvieran derecho los ejecutivos en representación de Bankia, serán abonadas al banco.
Parte de los consejeros 'supervivientes' tendrán que abonar las dietas por asistencia directamente a Bankia
Según avanzó el presidente de Bankia, en el discurso que pronunció el pasado viernes en la Junta de Accionistas de la entidad en Valencia, estas medidas supondrán una reducción de gastos para el grupo de más de 7 millones de euros anuales.
La intención de Goirigolzarri es tener completo es adelantar la salida de estos consejeros antes del fin del verano, a pesar de que en la Junta de Accionistas explicó que se podría conseguir en el próximo trimestre. "Estas reglas se aplicarán de forma progresiva, tratando de que afecte lo mínimo posible a la gestión diaria de las participadas, pero queremos que sean efectivas en todas nuestras filiales a lo largo del próximo trimestre".
La salida de consejeros irá acompañada de una simplificación del mapa societario del grupo BFA-Bankia, impuesta por el plan de recapitalización que tiene que aprobar Bruselas previa a la inyección de fondos públicos europeos.
