La bolsa cumple en estos días cinco años de auténtica pesadilla, un infierno del que no se han librado los grandes patrimonios de España. Para ser más exactos, todos menos el de mayor magnitud, Amancio Ortega, el único que ha sido capaz de engordar su cartera bursátil en este periodo. Gracias a él, el valor de la cartera de las grandes fortunas “sólo” ha adelgazado 17.840 millones desde el verano de 2007.
Hasta tal punto el del dueño de Zara es un “factor corrector” que los números sin contar con su aportación son estremecedores. Hace cinco años, el valor de las inversiones de las grandes fortunas españolas en bolsa superaba los 61.300 millones de euros, cifra que se ha visto reducida ahora un 30%, hasta los 43.465 millones. Pero el panorama es mucho más sombrío sin incluir a Amancio Ortega porque el descenso se va hasta el 71% y las cifras absolutas pasan de 42.750 millones de euros en junio de 2007 a apenas 12.215 millones en la actualidad.
Es decir, dejando al margen al fundador y principal accionista de Inditex, la cartera bursátil de los grandes patrimonios españoles ha adelgazado más de 30.500 millones de euros. Para hacerse una idea de la magnitud, la cifra supera en 4.000 millones la actual capitalización del BBVA.
El deterioro de la cotización de Acciona ha hecho que la familia Entrecanales encabece la clasificación de las grandes fortunas que han visto adelgazar más sus carteras (ver tabla adjunta). Como no podía ser de otra forma, el sector constructor adquiere el mayor protagonismo en este sentido por ser de los más afectados por la crisis. Así, Esther Koplowitz, accionista mayoritaria de FCC, ocupa el tercer puesto de la clasificación con un deterioro superior a los 4.200 millones en su participación.
La empresaria precede a la familia Del Pino, penalizada no sólo por su participación de control en Ferrovial sino por las que ostenta en Acerinox, Ebro Foods e Indra, que han contribuido a deteriorar su cartera en 300 millones de euros más.
Alberto Alcocer y Alberto Cortina, Florentino Péres y Juan Abelló son otros de los grandes patrimonios que se han visto penalizados por sus inversiones en el sector constructor.
Junto al ladrillo, los medios de comunicación han ocasionado también disgustos a las grandes fortunas. Especiamente significativo ha sido el caso de los Polanco, que cierran el grupo de los cinco más penalizados por la crisis en la bolsa. José Manuel Lara, dueño de Planeta, también figura en la lista debido al deterioro de su participación en Antena 3 TV. Su participación en Banco Sabadell ha sufrido una depreciación cercana a los 430 millones de euros.
En contraposición, Amancio Ortega ha visto como su cartera de inversiones bursátiles ha engordado más de 11.200 millones de euros en estos fatídicos cinco años, aun descontando el deterioro de su participación en NH Hoteles (cerca de 100 millones de euros).
Nada ha podido detener la trayectoria alcista de Inditex, lo que ha hecho que la otra gran fortuna que ha salido fortalecida de la crisis haya sido Rosalía Mera, la primera esposa de Ortega y accionista de referencia de la textil. La cartera de Mera se ha revalorizado cerca de 1.400 millones de euros.
Para hacerse una idea del poderío de los patrimonios de Ortega y Mera, en junio de 2007 el valor de sus carteras suponían un 30% del total acumulado por las grandes fortunas. Actualmente, esta cifra supera el 70%. Y una referencia más. Hace cinco años, el patrimonio en bolsa del resto de grandes fortunas era 2,3 veces superior al de Ortega y Mera. A día de hoy, la cartera de los fundadores de Inditex es 2,5 veces mayor que la suma de la del resto de grandes patrimonios.
