Las ayudas de la Política Agraria Común (PAC) sirven de refuerzo para bolsillos adinerados, los de grandes empresas y fortunas españolas. La familia Domecq, el millonario Nicolás Osuna, la Casa de Alba, grandes empresas como Ebro, J. García Carrión, Central Lechera Asturiana o Calidad Pascual... ellos son algunos de los grandes beneficiarios de las subvenciones que, a cargo del presupuesto comunitario, se otorgan en relación a las hectáreas que se posean, sin necesidad de que estas produzcan.
Así se desprende del estudio realizado por la oenegé VSF, Justicia Alimentaria Global. Según este estudio realizado por Ferrán García, Nicolás Osuna, séptima fortuna de Andalucía y una de las mayores de España con 350 millones de euros según Forbes, es el español que más ha recibido según un informe realizado por la oenegé VSF Justicia Alimentaria Global. Osuna, propietario del grupo Noga, tiene además de negocios inmobiliarios de relevancia un coto de 10.000 hectáreas en Andújar (Jaén). Ha recibido de Europa 8,2 millones de euros, el que más en 2014.
Tampoco se quedan cortos otros terratenientes: los Mora-Figueroa Domecq. Esta familia, que con 800 millones de euros según Forbes son la quinta fortuna de Andalucía, gracias entre otras cosas a haber dispuesto durante muchos años de la exclusividad para embotellar Coca-Cola en el sur de España, pero también a sus negocios bodegueros en Jerez. Han recibido más de 4 millones de euros de la PAC.
Compañías poco conocidas como Zumavesa o las tomateras Juliano Bonny y Bonissa superan los 4 millones en subvenciones
Aunque quizá el caso más famoso sea el de la Casa de Alba. Los Fitz-James Stuart son la primera fortuna de Andalucía y una de las mayores de todo el país. La PAC les surtió de 3 millones de euros de dinero público. Precisamente Cayetano Martínez de Irujo, hermano del actual duque de Alba, aseguró que "no le parecía bien" que existiera el subsidio agrario (PER) y aseguró que "en Andalucía hay otra mentalidad, que la han creado los subsidios. Por ejemplo en las subcontratas de nuestra empresa ha existido un 30% de contratación falsa".
"En los últimos 20 años no se ha incentivado a los andaluces a que trabajen más y en esta comunidad se produzca más. Andalucía es la comunidad en la que más se ha invertido y donde menos se ha progresado", aseguraba Martínez de Irujo. "Cuando ves a gente joven que no tiene ni el menor ánimo de progresar, eso es grave. Yo eso sólo lo he visto en Andalucía, ni siquiera en Extremadura", aseguró el empresario agrícola en una entrevista en La Sexta.
En general, la economía andaluza es eminentemente agrícola y como muestra de ello observamos el dato, incluido en el estudio, de que 4 de las 7 mayores fortunas andaluzas reciben ayudas millonarias de Bruselas para el desarrollo agropecuario.
Grandes empresas alimentarias
Por otra parte, también es de destacar el buen número de compañías de importancia en el sector alimentario que reciben cuantiosas ayudas de los fondos europeos, según la recopilación de Justicia Alimentaria Global. Tal es el caso de Mercadona, primera compañía de distribución de España, que recibió según esta recopilación 2,5 millones de euros en ayudas comunitarias. Desde la empresa valenciana se han puesto en contacto con Vozpópuli para puntualizar que estas ayudas no tienen nada que ver con la política agraria común, tal y como anunciaba el informe de VSF.
"Los 2,5 millones recibidos por Mercadona que se mencionan en el artículo corresponden al Programa de Opciones Específicas por la Lejanía e Insularidad (POSEI), concretamente, el REA (Régimen Específico de Abastecimiento), que tiene como objetivo garantizar el abastecimiento de productos esenciales y su finalidad es bajar los precios de esos alimentos", han dicho los supermercados. "Estos fondos no tienen nada que ver con las ayudas de la PAC al campo", zanjaron.
Calidad Pascual, la histórica empresa lechera, fue subvencionada con 600.000 euros mientras que su competidor Central Lechera Asturiana le superó en este aspecto haciéndose con un millón de euros de la Política Agraria Común.
Pero son muchas otras las históricas empresas alimentarias que se benefician de ayudas. Por ejemplo, Ebro Foods, en la actualidad una de las principales compañías alimentarias españolas, especializada en arroz y pasta y que cuenta con marcas como SOS, Brillante, La Fallera, La Cigala... esta empresa se ha embolsado casi 3 millones de euros en subvenciones, según el informe de la ONG. Ebro está controlada por la familia Hernández (su presidente es Antonio Hernández Callejas), que es la cuarta mayor fortuna de Andalucía con 850 millones de euros de patrimonio según Forbes.
Cruzando Andalucía hacia el este llegamos a Murcia, donde se encuentra la sede histórica de J. García Carrión, compañía dueña de marcas bien conocidas como Don Simón que recibió este año 3 millones de euros según el estudio. García Carrión es una de las bodegas que más vende en España y además concentra actividad comercial en 130 países más.
Y un poco más arriba, en Valencia, encontramos a Zumavesa, una empresa que ha recibido este año 6 millones de dinero público, pero que en 2011 batió records al recibir más de 10 millones (el 6% de las ayudas de la PAC en la Comunidad Valenciana según el informe). Creada en 2009, esta empresa nace para dar salida al excedente de naranjas que no se pueden comercializar, y según el informe no podría entenderse su actividad económica si no es para recibir ayudas públicas.
Por último, dos empresas tomateras como son Juliano Bonny y Bonnysa han recibido 4 millones y 5,6 respectivamente. Esta última compañía con sede en Mutxamel (Alicante), ha anunciado recientemente un ERE de 150 personas después de desengancharse como interproveedor de Mercadona.