Un par de meses antes de que Orizonia se declarara en preconcurso de acreedores, la antesala de lo que luego fue el mayor concurso de acreedores de una empresa turística española, Globalia acordó la adquisición de la división hotelera de la compañía, Luabay, por 15 millones de euros. La administración concursal de Orizonia reclama ahora 13 millones de euros a Globalia por aquella operación.
En marzo de 2013 Orizonia, con 5.000 empleados y una deuda de 2.085 millones de euros, se declaró en concurso de acreedores, pocos meses después de haber vendido al grupo de Juan José Hidalgo la filial hotelera. Al filo de la quiebra, Carlyle, la sociedad de capital riesgo estadounidense propietaria de Orizonia, negoció la venta de todo el grupo turístico con Globalia, y también con Barceló, sin que finalmente se llevara a cabo la operación. En enero de 2013 se llegó a comunicar la venta de Orizonia a Globalia, por 60 millones de euros y el traspaso de la deuda. Pero a finales de febrero la Comisión Nacional de la Competencia informó que la operación podría obstaculizar "la competencia efectiva en los mercados analizados", y Orizonia quedó expuesta al concurso de acreedores. En mayo de 2014 Orizonia fue a liquidación.
La administración concursal de Orizonia reclama 159 millones a Carlyle
Los administradores designados por el juez en el concurso de Orizonia sostienen que la venta de Luabay a Globalia se produjo por 13 millones de euros menos de su precio real. Para ello han aportado un informe al juzgado mercantil número uno de Palma de Mallorca en el que un experto independiente valora la filial hotelera de Orizonia en 28 millones de euros. Los administradores concursales han propuesto al juez que en lugar de que Globalia aporte 13 millones en metálico, la compañía de Juan José Hidalgo se haga cargo de deudas de dos empresas de Orizonia por el mismo importe.
El pasado mes de abril la administración concursal de Orizonia presentó otra acción rescisoria reclamando también a Barceló otros 60 millones de euros. Los administradores entienden en este caso que en febrero de 2013 Orizonia traspasó a Barceló sin apenas contraprestación su aerolínea portuguesa Orbest (un Airbus A-330 y dos A-320) y la agencia de viajes Vibo (152 establecimientos, 1.000 empleados).
Globalia ingresó 3.379 millones de euros en 2015, ejercicio en el que logró un beneficio de 4,1 millones de euros, un 85% menos que en 2014. El grupo propietario de Air Europa emplea a más de 11.000 personas.
Calificación del concurso
El juez a cargo del concurso de Orizonia tiene que comunicar próximamente fecha para la vista en la que se tratará la calificación del concurso del que fuera el mayor grupo turístico español. Fuentes que participan en el proceso estiman ahora que la vista posiblemente se celebrará tras el verano, probablemente en octubre. A principios de año se contaba con que la vista tendría lugar entre los meses de junio y julio.
Los administradores concursales solicitan la declaración de concurso culpable, y reclaman a Carlyle 159 millones de euros. La firma estadounidense creó Orizonia tras adquirir, en 2008, el grupo Iberostar por 844 millones de euros. En la operación también participó la sociedad de capital riesgo española Vista Capital, controlada por Santander, hoy desaparecida. La administración concursal considera que el concurso de Orizonia se debió, básicamente, a que la compañía no pudo atender a los préstamos concedidos a las firmas de inversión para comprar Iberostar, y que fueron trasladados a las cuentas de Orizonia.