El grupo automovilístico Fiat Chrysler Automobiles (FCA) calificó este jueves de "infundada" la demanda por fraude presentada por General Motors (GM) por sobornar supuestamente a un sindicado en Estados Unidos para la firma de un convenio colectivo.
"FCA confirma que se defenderá con todas sus fuerzas de la causa promovida ayer por GM. FCA está convencida de que las acusaciones dirigidas por GM no son más que un intento para apartar la atención de sus propios desafíos", se lee en un comunicado.
GM demandó por fraude organizado ante el tribunal de Detroit (Michigan) a FCA por supuestamente sobornar al sindicato United Auto Workers (UAW) e influir en la negociación que la compañía mantenía con los sindicatos para la firma de un convenio colectivo.
El vicepresidente ejecutivo y asesor jurídico de GM, Craig Glidden, afirmó que "esta demanda tiene la intención de hacer que FCA responda del daño que han causado sus acciones a nuestra compañía y asegurar que todos siguen las mismas reglas de ahora en adelante".
El principal fabricante estadounidense aseguró que FCA "corrompió la implementación del acuerdo del convenio colectivo de 2009", y "corrompió la implementación y administración de los convenios de 2011 y 2015".
Posible fusión con PSA
Para FCA, compañía italo-estadounidense, esta "desconcertante maniobra" llega en un momento en el que planea fusionarse con el grupo francés PSA, fabricante de Peugeot, Citroen u Opel, para crear el cuarto coloso mundial del sector del automóvil.
"Esta desconcertante maniobra llega en un momento en el que FCA está demostrando ser una competencia cada vez más fuerte y continúa creando un importante valor para todos sus interesados, implementando con éxito su propia estrategia a largo plazo", apunta.
Además, señala que PSA "ha completado exitosamente el saneamiento de sus negocios europeos que recientemente compró a General Motors".
Por esa razón, la compañía FCA avanza que se defenderá de lo que considera un "intento de distracción".
"FCA gestionará este extraordinario intento de distracción a través de los canales adecuados y continuará concentrándose en producir resultados de récord y llevando a cabo su entusiasta visión del futuro de la industria automovilística", afirma.
Y concluye en su comunicado: "FCA tiene confianza, se defenderá de estas acusaciones en los tribunales y pretende adquirir todas las protecciones disponibles como respuesta a esta causa sin fundamento".
De acuerdo a la demanda de GM, la intención de FCA era forzar la fusión entre las dos compañías, algo que el ya fallecido consejero delegado de Fiat Chrysler, Sergio Marchionne, buscó en varias ocasiones durante años. La última vez fue en la primavera de 2015, cuando GM rechazó públicamente las ofertas de FCA.
Se da la circunstancia de que FCA acaba de anunciar un acuerdo de fusión con el fabricante PSA (Peugeot, Citroën, DS y Opel) y está en negociación con esta empresa francesa para materializarlo.
GM alega que Marchionne conspiró con el expresidente de UAW, Dennis Williams, amigo del directivo italo-canadiense, y otros altos funcionarios del sindicato, para que el proceso de negociación del convenio colectivo "dañase GM" e "intentase forzar la fusión de las compañías".
FCA y UAW querían, según la demanda, provocar que el resultado de las negociaciones laborales costasen a GM "miles de millones de dólares".
Cada cuatro años, el sindicato UAW elige a uno de los tres grandes fabricantes de automóviles estadounidenses (GM, FCA y Ford) para fijar las líneas generales que regirán los convenios colectivos del sector.
Según GM, en 2015 los directivos de FCA y UAW conspiraron para que Fiat Chrysler fuese la empresas que estableciese el estándar de negociación, lo que supuso que General Motors acabase aceptando un acuerdo que le costó 2.000 millones de dólares, el doble de lo inicialmente anticipado.
La demanda de GM es fruto de la investigación federal iniciada en 2017 contra directivos de FCA y UAW y que, de momento, ha supuesto la imputación de trece personas de las dos organizaciones e implica, al menos, a dos antiguos presidentes del sindicato.
Esta es la primera vez que la demanda señala a Marchionne, que falleció de forma inesperada en julio de 2018, como cerebro de la presunta operación fraudulenta.