La agencia de calificación de riesgos Fitch cree que pasarán "varios años" antes de que la banca española se financie con normalidad en los mercados internacionales de crédito. No obstante, admite que la liquidez obtenida mediante la captación de depósitos permitirá a las entidades reducir sus costes de financiación. En un informe publicado este martes, Fitch asegura que el proceso de reestructuración del sector financiero permitirá a los bancos españoles reducir su dependencia en términos de liquidez del Banco Central Europeo (BCE).
El documento indica que los procesos de fusiones, adquisiciones y operaciones corporativas, como el que actualmente está en marcha entre el Banco Sabadell y Banco Mare Nostrum, contribuirá a recuperar la confianza de los depositantes y de los inversores, ya que un número menor de entidades financieras más eficientes tendrán mayor capacidad para absorber las pérdidas derivadas del sector inmobiliario y del riesgo soberano.
Banco Mare Nostrum -grupo formado por Caja Murcia, Granada, Penedés y Sa Nostra- y Banco Sabadell, han cerrado un preacuerdo que establece las bases para la adquisición por parte de este último del negocio bancario en Cataluña y Aragón del grupo de cajas de ahorro. La agencia prevé que en los próximos meses se verán más operaciones de este tipo, aunque advierte de que deben llevarse a cabo con prudencia y no perjudicar el perfil financiero de las entidades de mayor tamaño.
Todo ello tendrá un efecto positivo en la estabilidad del sector y en las calificaciones que aplica la agencia a medio plazo. En el futuro inmediato, Fitch calcula que el tamaño y el número de bancos se reducirá aproximadamente en un 25%, y que tal y como sucedió en Grecia e Irlanda con sus entidades financieras, se consolidará el desapalancamiento del sector.
En su informe, Fitch advierte sobre el freno que supone para la reestructuración de la banca española la crisis que atraviesa la zona del euro y destaca el distinto impacto que tiene el entorno en las entidades en función de su tamaño.
Los bancos más grandes son los más beneficiados por los procesos de fusión, y aunque en general Fitch valora el estricto control de costes de la banca española, también duda de que se produzca a corto plazo una mejora de los beneficios.