El Gobierno lleva meses asegurando que los fondos europeos alcanzarían la velocidad de crucero este año, pero los datos demuestran lo contrario. Sólo ha movilizado un 16% de los fondos europeos previstos para este año, 4.500 millones de los 28.400 que ha presupuestado para este ejercicio. Este dinero responde fundamentalmente a transferencias a las comunidades autónomas, que son las encargadas de asignar los fondos a empresas públicas o privadas, con lo que no ha salido de la Administración y no ha llegado a las empresas.
Según el informe de ejecución presupuestaria de la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE), a cierre de julio se habían autorizado 17.300 millones, de los cuales 13.600 millones estaban comprometidos, 9.500 millones figuraban ya como obligaciones reconocidas, y sólo 4.500 millones se habían pagado. Sobre el destino de esos fondos, 3.000 millones fueron a las comunidades autónomas y el resto se transmitió a organismos públicos como Adif (367 millones) o el SEPE (516 millones).
De esta forma, el Gobierno sigue sin proporcionar datos de ejecución real de los fondos europeos en términos de contabilidad nacional, que son los que permitirían saber cuántos fondos han llegado realmente a la economía. El último dato, de agosto de 2021, lo publicó la IGAE en septiembre de 2021 y generó polémica por la baja ejecución (104 millones). Desde entonces, no se ha vuelto a actualizar.
El Gobierno se ha limitado a actualizar el mismo dato al que se refiere esta noticia, el total de dinero desembolsado, que nada tiene que ver con la cantidad de fondos europeos que ha llegado al tejido productivo. Aún así, a cierre de 2021 los pagos realizados fueron 11.003 millones, apenas el 45% del total, a los que se suman ahora los mencionados 4.500 millones. Tampoco hay información sobre el 55% restante que aún no se había pagado a cierre del ejercicio.
2.400 millones ejecutados en 2021
No obstante, la Comisión Europea sí publicó el pasado mes de julio un informe con el nivel de ejecución a cierre de 2021 en términos de PIB con la información que los países le habían proporcionado. Según las cifras que maneja Bruselas, aunque el Gobierno presupuestó 26.000 millones con cargo a los fondos UE para gastar en 2021 y recibió en agosto 9.000 millones de Bruselas a modo de prefinanciación, únicamente gastó unos 2.400 millones, el 0,2% del PIB.
La ejecución calculada por fuentes expertas y confirmada por la CE demuestra que el impacto de estos fondos en la economía fue, en el primer año de ejecución, muy inferior al previsto inicialmente por el Gobierno (2 puntos de PIB, según consta en el Programa de Estabilidad enviado a Bruselas en abril de 2021). No obstante, el caso de España no era aislado. La mitad de los Estados miembros, un total de 14, no habían gastado ni un euro con cargo al MRR a cierre del 2021.
Bruselas percibe el retraso que se está produciendo en la ejecución de los fondos UE, sobre el que también han alertado diferentes organismos económicos nacionales, entre ellos el Banco de España (BdE) y la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF). En el Ejecutivo comunitario asumen que la llegada del dinero a la economía española en el primer ejercicio, 2021, ha sido insuficiente, según ha podido saber Vozpópuli. De hecho, el impacto que han tenido estos fondos en el crecimiento del PIB, aún por debajo de los niveles previos a la pandemia, ha sido menor del esperado por Bruselas.
De hecho, Francia gastó cinco veces más fondos europeos que España en 2021 pese a que recibió la mitad. España había ejecutado hasta 31 de diciembre sólo un 3,47% de subvenciones que recibirá desde Bruselas, por un 31,74% de Francia o un 27,90% de Alemania.
El 75% del dinero de la primera gran convocatoria se ha quedado sin adjudicar
El Gobierno arrancó el año con un remanente importante de fondos que no se ejecutaron en 2021 y estaban presupuestados: unos 2.600 millones que se quedaron sin autorizar en 2021 y 14.435 millones autorizados el pasado año pero de los que no se llegaron a cerrar o lanzar las convocatorias. Por esa razón, el Gobierno se comprometió a movilizar en el primer semestre de este año 38.500 millones, de los cuales el 43% se arrastraban de 2021.
Los expertos creen que parte de los 26.900 millones de fondos europeos presupuestados para 2022 volverán a quedarse sin gastar este año, precisamente, porque el Gobierno tiene que hacer uso de los remanentes. Un efecto denominado 'bola de nieve' y que ha traído a colación la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) ante lo acaecido a finales del año pasado.
De momento, la principal convocatoria del primer gran proyecto vinculado a los fondos europeos Next Generation EU, formalmente conocidos como Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE), se ha resuelto dejando sin asignar el 75% del dinero, o lo que es lo mismo, tres de cada cuatro euros presupuestados, tal y como avanzó Vozpópuli en agosto. De los casi 2.975 millones dispuestos para la parte industrial del PERTE del Vehículo Eléctrico y Conectado, únicamente se han adjudicado 703 millones.
Karl
Téngase en cuenta también el efecto inflacionario que esos fondos van a causar: Más dinero buscando cosas que comprar ;-)
Karl
Nunca debe asumirse que una persona, que dice que quiere resolver un problema, no está más interesada en mantener el problema, que en resolverlo.