El Ibex 35 ha conseguido frenar la sangría este viernes al cerrar prácticamente plano. Pero el daño ya está hecho. Desde comienzo de año, el principal selectivo español ha perdido más de 25.400 millones de euros. Se trata de un retroceso que le ha llevado a niveles de noviembre de 2016, al cerrar en los 8.892 puntos.
El sutil rebote se produjo gracias a la decisión del Supremo de revisar su laudo sobre las hipotecas. Aunque el agujero que se ha abierto en la banca será muy difícil se subsanar, teniendo en cuenta que la crisis en Italia aún sigue abierta, el principal motivo por el que comenzaron los recortes en el sector.
Los analistas de Link Securities apuntan a que esta sentencia podría convertirse en un duro castigo para la banca y afirma que el impacto en los resultados y en el capital de las entidades será muy importante. Morgan Stanley y analistas de BBVA ven en riesgo 9.000 millones por la sentencia de las hipotecas
Italia
Las dudas que hay sobre el futuro político del país transalpino ha llegado hasta Bruselas. Lo que parecía sólo amenazas y amagos, finalmente se han convertido en un texto que ha hecho temblar a los mercados de renta fija. El bono italiano a diez años se ha llegado a disparar hasta el 3,7%, lo que ha arrastrado también su homólogo español.
La coalición formada por el movimiento 5 Estrellas y la Liga Norte continua con su intención de ampliar el déficit hasta el 2.4% durante el año 2019, lo que supone un desafío para las instituciones europeas. Italia es la tercera potencia de la Unión Europea, y ya acumula la segunda mayor deuda en Europa después de Grecia.
No obstante, la prima de riesgo también se ha visto afectada por la presentación de los nuevos Presupuestos, más expansivos y con medidas muy controvertidas. Cabe destacar que durante esta semana, el bono italiano se frenó y el español comenzó su remontada, hasta niveles que no se veían desde 2015.
PGE
Bank Of America ya ha emitido una opinión sobre los PGE españoles y no es buena. La afirma americana asegura que España se va a encontrar con un problema fiscal a medio plazo que no va a saber resolver. También expone su preocupación ante la retirada de ciertas reformas de carácter estructural que podrían mermar la opinión de las agencias de rating sobre la solvencia del país.
El banco también se cuestiona cómo va a recaudar el Ejecutivo todo el dinero que plantea con la Tasa Tobin y la Tasa Google. En este último caso, la firma estima en 400 millones lo que puede recaudar el fisco, una tercera parte de lo que asegura Hacienda.
Toda esta incertidumbre política ha provocado que el Ibex 35 se haya dejado más de un 5% en lo que corre de octubre y un 11% en el año.
Wall Street
Las idas y venidas de Wall Street desde comienzo del curso tampoco han ayudado al selectivo. Las guerras comerciales nunca han sido buena, apuntan todos los analistas. Y ya están pasando factura. De hecho, durante las últimas sesiones Wall Street lo ha sufrido.
El principal problema en Estados Unidos es la ruptura de su relación con China por la imposición de aranceles que encarecen los productos de ambos países y que podrían llevar a una reducción en el volumen de negocio entre dos de las potencias más importantes del mundo.
Diferentes informes ya hablar de una ralentización de la economía global por culpa de este problema. Además se ha publicado como la balanza comercial entre EEUU y China ha aumentado todavía más a favor del gigante asiático.
La subida del bono a 10 años en EEUU también está tensionando a los inversores, que ven como las siguientes subidas de tipos de interés pueden encarecer el dinero de tal manera que la renta variable pierda atractivo, según Joaquín Robles, analista de XTB.
En Europa, las negociaciones a cerca del brexit continúan estancadas a medida que se acerca la fecha límite para llegar a un acuerdo. Parece que las opciones más probables en este momento son un brexit sin acuerdos importantes, que perjudicaría a Gran Bretaña o la celebración de un nuevo referéndum.
A pesar de que los datos macro continúan mostrado la economía a nivel global en un ciclo expansivo, estamos empezando a ver ciertos síntomas de agotamiento. Esto no quiere decir que se vaya a producir un cambio de tendencia en el corto plazo, pero sí que podríamos ver una corrección más severa.
Aunque es cierto que la resolución de alguno de los actuales catalizadores negativos podría provocar un rebote en el mercado, también es posible que durante este trimestre se sumen nuevas dudas al mercado, como los resultados empresariales, las elecciones al senado en EE.UU., la fortaleza del dólar o la evolución de los precios del petróleo.