El Índice de Precios de Consumo (IPC) ha batido todas las expectativas en septiembre al bajar la inflación ocho décimas, hasta el 1,5%. Es la menor tasa de toda la crisis inflacionista, desde marzo de 2021. Queda incluso por debajo del umbral de referencia del Banco Central Europeo (BCE), ubicado en el 2%.
Se esperaba una mejora de la inflación en septiembre desde el 2,3% en el que se situó en agosto al entorno del 2%, pero finalmente la reducción ha sido el doble de significativa. Desde el Instituto Nacional de Estadística apuntan al descenso de los precios de los carburantes y también de los alimentos y la electricidad.
La inflación subyacente, menos volátil al excluir los precios de los alimentos frescos y de la energía, también se ha reducido, pero mucho más levemente. Continúa en el 2,4%, por encima del objetivo del BCE, con los servicios aún presionando al alza. Aún así, se ha reducido en tres décimas en septiembre.
A partir de octubre se augura un nuevo repunte tanto de la inflación general como de la subyacente por los efectos base. La inflación es una tasa anual que refleja la variación que han sufrido los precios en el último año, por lo que se ve afectada por el punto de partida del ejercicio anterior. En este sentido, en el último trimestre se prevé un ligero empeoramiento.
Desde el Ministerio de Economía celebran los datos, especialmente el de la inflación general, y recalcan que es "la tasa más baja en los últimos tres años y medio, desde marzo de 2021". También destacan que está por debajo del 2% que marca el BCE. Esto, en todo caso, deberá mantenerse en el tiempo para dar por superada la crisis inflacionista.
Subida de las pensiones en 2025 con el IPC
Como ya informó Vozpópuli, las sorpresas positivas que está dando la inflación permiten anticipar que las pensiones se revalorizarán por debajo del 3% en 2025. En 2022 subieron un 2,5%; en 2023, un 8,5%; y este 2024, un 3,8%. Para 2025, se hará una media de la variación del IPC registrada entre diciembre de 2023 y noviembre de 2024.
En los primeros diez meses del periodo, entre diciembre de 2023 y septiembre de 2024, la tasa media es del 2,9%. La inflación tendría que volver al 3% en los dos meses que faltan (octubre y noviembre) para que la revalorización de las pensiones en 2025 alcanzara ese 3%. Que supere esa cifra, como se esperaba hace unos meses, ya es prácticamente inviable.
En todo caso, la revalorización será significativamente superior a la que se producía antes de la crisis inflacionista (1,6% en 2019 y 0,9% tanto en 2020 como en 2021) y la nómina media por jubilación rondará ya los 1.500 euros mensuales tras subir alrededor de 40 euros.