Los tiempos dorados para la industria de fondos en España parecen algo cada vez más lejano. El declive comenzó hace ya más de cinco años cuando en mayo de 2007 el patrimonio bajo gestión de los fondos cerró el mes en 261.076 millones, un récord histórico. Desde el entonces la huida de los inversores, unida a la evolución de los mercados ha provocado que el patrimonio bajo gestión en la industria se haya reducido a menos de la mitad. Ha caído un 53% desde el máximo y algo menos de la mitad desde los 238.322 millones con los que concluyó en diciembre de 2007.
La inestabilidad de los mercados, las crecientes dificultades financieras de las familias por el recrudecimiento de la crisis y los disgustos que han recibido los inversores en los últimos años en términos de rentabilidad han llevado a muchos partícipes a echar manos de sus ahorros, lo que ha mermado el patrimonio de los fondos en 115.821millones de euros desde finales de 2007. Una tendencia que se ha visto agravada por las políticas comerciales de los bancos.
En los últimos tiempos muchas grandes entidades han dejado de lado la promoción de fondos para centrarse en la captación de pasivo ante las crecientes necesidades de capital del sector. La guerra de los depósitos se ha convertido así en un importante competidor para la industria de fondos, especialmente tras la proliferación de depósitos de alta remuneración en un momento de tipos bajos. Este año todavía ha habido ofertas de algunas entidades con rendimientos cercanos al 5% en 12 meses.
En este entorno, la pérdida de patrimonio se ha convertido en una constante para los fondos de inversión. En los últimos cinco años las caídas patrimoniales más fuertes se produjeron entre junio de 2007 y principios de 2009. El estallido de la crisis subprime en EE UU y su contagio a Europa provocó la salida masiva de muchos ahorradores. En los últimos años el goteo a la baja ha continuado pero a ritmos algo menores. En 2008 el patrimonio de la industria cerró en 167.643 millones, para después caer a 163.255 en 2009 y volver a sufrir otro importante varapalo en 2010 al retroceder hasta los 138.024 millones. Una cifra que quedó en los 123.038 millones de euros a cierre del pasado ejercicio.
Este año los reembolsos netos alcanzan ya los 9.311 millones de euros tras las salidas netas de noviembre (1.140 millones). En el acumulado del año destacan las suscripciones netas en gestión pasiva (428 millones) y renta fija euro largo plazo (122 millones), mientras que las categorías que más reembolsos netos han sufrido son la Renta fija Euro Corto Plazo (2.860 millones), los garantizados de rendimiento variable (2.511 millones) y los Monetarios (1.404), según los últimos datos oficiales de Inverco.
La pérdida de patrimonio ha provocado que el número de partícipes también se reduzca a casi la mitad y a finales de noviembre se situó en 4.514.071, muy lejos de los 8.818.693 de finales de 2007.
La buena noticia para quienes tengan fondos es que la rentabilidad media anual de los últimos 12 meses se situó en el 6,4%, una cifra que recoge la recuperación reciente del mercado y que es la más alta desde junio de 2007, cuando alcanzó el 7,16%.